Cultura general

¿Qué es la higiene corporal y por qué es importante?


¿Qué es la higiene corporal?

La higiene corporal es todo aquello que hacemos para limpiar nuestro cuerpo y mantenernos alejados de microorganismos que producen enfermedades. Los hábitos de higiene, tal y como los conocemos y practicamos, son relativamente nuevos, y a lo largo de la historia han sufrido variaciones importantes.

Es importante destacar que en la pandemia del coronavirus que el mundo en pleno acaba de vivir, mantener hábitos de higiene ha ayudado en algunos sitios a que los contagios hayan disminuido.

Lavarse las manos antes de comer, ducharse, cambiarse de ropa, son algunos hábitos de higiene corporal que debemos implementar diariamente para que nuestra salud no se resienta.

Hábitos de higiene corporal que todos debemos tener

1. Lavarse las manos luego de ir al baño

Es importante que después de hacer nuestras necesidades (orinar, defecar) nos lavemos las manos con jabón.

2. Lavarse las manos antes de comer

Si no preparamos la comida, hay que lavarse las manos antes de sentarse a la mesa. Si hacemos la comida, debemos lavarnos las manos antes y después de prepararla.

3. Lavarse las manos después de jugar con las mascotas

Si tienes mascotas es imprescindible que te laves las manos. Nuestros queridos amigos animales nos proporcionan un montón de beneficios, entre ellos, fortalecer nuestro sistema inmune. Pero no puedes comer de su plato (ni permitir que la mascota coma del tuyo) y hay que lavarse muy bien las manos con agua y jabón luego de jugar.

4. Darte una ducha diaria

Nuestros padres nos enseñan desde que somos pequeñitos a bañarnos: lavarnos el cabello, bajo los brazos, el cuello, las manos y nuestros genitales. Darse una ducha diaria mantiene a raya malos olores corporales y la suciedad.

5. Cortarse las uñas con regularidad

Debajo de las uñas se acumula mucha suciedad. Es recomendable mantenerlas cortas y cepillarlas bien para retirar cualquier partícula. Por otra parte, tener las uñas limpias siempre da una buena imagen.

6. Limpiar y secar bien los pies

Cuando te bañas debes enjabonarte entre los dedos de los pies y las uñas. Y hay que secarlos bien para evitar la aparición de hongos, especialmente en verano.

7. Lavarse los dientes

Siempre, después de comer, hay que lavarse los dientes. Previenes las caries y tendrás una dentadura envidiable, aunque cumplas 100 años. Es bueno también que antes de ir a dormir te los cepilles, recuerda que pasarás muchas horas durmiendo.

8. Limpiar las orejas

Cuando te bañes y te laves el pelo, aprovecha a la hora de secarte de repasar las orejas con una toalla, entre los pliegues y por detrás. No debes introducir hisopos, pues no son efectivos y pueden causar daño.

9. Suénate la nariz

Cuando sufrimos de alergias es común que tengamos más mucosidad de lo habitual, pero el exceso puede dificultar una correcta respiración y obstruir las fosas nasales. Suénate la nariz en el baño, con pañuelos de papel limpios. Tapa una fosa nasal y suénate la otra, y luego haz al contrario. No lo hagas con las dos a la vez. Tampoco te toques la nariz con las manos sucias.

10. Ponerte ropa interior limpia después de bañarte

Cambiarse la ropa interior luego de bañarse es fundamental para evitar infecciones genitales. Cuando las niñas se convierten en adolescentes les viene la menstruación, y es primordial saber mantener una buena higiene personal.

Los adolescentes suelen sudar mucho, y no conviene ponerse la misma ropa interior después de bañarse.

11. Una buena higiene en el váter

Es importante que aprendas a limpiarte luego de ir al baño, para evitar infecciones. Después de defecar hay que limpiarse muy bien, y el último papel debe quedar totalmente limpio.

Si eres niña debes limpiarte de adelante hacia atrás, para que no arrastres posibles restos de heces a la vagina.

Luego de usar el inodoro hay que tirar de la cadena y comprobar que queda limpio. Por último, recordar lavarte las manos con agua y jabón.

12. No compartir artículos de aseo personal

No compartas tus artículos de aseo personal con nadie, como tu cepillo de dientes, la toalla con la que te secas, tu peine o, por supuesto, tu ropa interior. Estar limpios es la mejor manera de evitar infecciones y enfermedades.

Importancia de la higiene corporal

¿Sabías que Ignaz Semmelweis, un médico húngaro del siglo XIX, trató de que en el hospital de Viena donde trabajaba los cirujanos se lavaran las manos antes de hacer las operaciones quirúrgicas, por allá en 1840?

Algo que nos resulta tan obvio no lo era en aquella época. Ignaz no sabía explicar muy bien por qué era importante, pero sabía que las elevadas tasas de mortalidad en los hospitales tenían que ver con la suciedad. No podía explicarlo porque aún no se sabía nada de los gérmenes.

Las condiciones hospitalarias eran terribles, y a nadie se le pasaba la cabeza que en parte se debía a que no existía una higiene corporal aceptable. Tanto los médicos como los pacientes andaban sucios, y la propagación de enfermedades en los hospitales era abrumadora.

Lo malo fue que pensaron que Ignaz estaba loco y lo metieron en un manicomio, por insistir en que los médicos se lavasen las manos. En ese tiempo, uno de los grupos con mayor mortalidad era el de las mujeres embarazadas y parturientas.

Cuando obligó a que los estudiantes de medicina que pasaban de diseccionar cadáveres se enjuagaran las manos con una solución antiséptica antes de tratarlas, la tasa de mortalidad bajó abruptamente: de 18.3% en abril de 1847 a 2% en mayo del mismo año. Solo con lavarse las manos.

Ahora, aunque no seamos médicos igual debemos lavarnos las manos y andar siempre limpios. Lavarse las manos antes de comer es primordial porque evitamos que los gérmenes y bacterias del exterior contaminen la comida que comemos, y en consecuencia lleguen a nuestro estómago.

Evitamos que en nuestro organismo crezcan parásitos intestinales, suframos de infecciones como las gastroenteritis, enfermedades de la piel como la sarna y otras condiciones más graves, como la infección por estafilococo, entre otras muchísimas. Hasta prevenimos gripes. Y mantenemos a raya al Covid.

También es importante tener buenos hábitos de higiene corporal porque mantenemos la salud de nuestra piel y el interior del cuerpo, evitamos las caries en los dientes y mantenemos, además, una buena relación con los demás porque no tenemos malos olores ni mal aliento, y no nos contaminamos entre nosotros.

Y es que no solamente ayuda a prevenir infecciones. Estar limpios nos aporta una gran sensación de confort, sobre todo cuando estamos enfermos, ¿lo has notado? Es importante, asimismo, que el entorno, es decir, la casa, la escuela, esté limpio para minimizar la posibilidad de enfermarnos. Y no solo eso, nos ayuda a sentirnos mejor con nosotros mismos y con nuestra apariencia.

Referencias

  1. Holland, K. (2018). Creating a Personal Hygiene Routine: Tips and Benefits. Tomado de healthline.com.
  2. Personal Hygiene (2021). Tomado de healthdirect.gov.au.
  3. 10 hábitos de higiene saludables (2021). Tomado de buenosaires.gob.ar.