Cultura general

Método fenomenológico: qué es, características, etapas, ejemplos


¿Qué es el método fenomenológico?

El método fenomenológico es aquel que nos permite explorar diferentes situaciones de la vida y del mundo, entendiendo que lo hacemos desde un punto de vista subjetivo, es decir, a partir de nuestros sentidos y de lo que hacemos con lo que percibimos en nuestra conciencia.

El método como tal nos permitiría analizar, descubrir o comprender, y finalmente conocer el fenómeno estudiado, tal cual es y como se presenta ante nosotros.

Este método se deriva de la fenomenología trascendental, desarrollada por el matemático y filósofo alemán Edmund Husserl (1859-1937), con aportes posteriores de pensadores como Max Scheler, Martin Heiddegger o Inmanuel Levinas, entre otros.

Características del método fenomenológico

Su campo de acción

El campo de la fenomenología es el estudio de los fenómenos o las experiencias de lo real, y del modo como lo percibimos.

Método y filosofía

Es una filosofía y un método, resultado de distintos aportes a lo largo del siglo XX, con variaciones y adaptaciones dependiendo de la rama de conocimiento en el que se utilice.

Acercamiento

El método fenomenológico presupone acercarse a un fenómeno sin ningún prejuicio o teoría previa que pueda afectar o distorsionar la observación del mismo. No es anticientífico, pero propone aproximarse a la información recogida científicamente, sin presupuestos o teorías previas.

Sintetiza lo objetivo y lo subjetivo

La observación subjetiva no está descartada; la fenomenología busca una síntesis  entre lo objetivo (el fenómeno) y lo subjetivo (la consciencia).

Permite la empatía

En ciencias sociales y en ramas profesionales que involucran interacción con individuos o grupos (educación, salud, manejo de recursos humanos, etc.), el método fenomenológico permite ponerse en lugar del “otro” y de su entorno.

Vigencia de tiempo y lugar

El método fenomenológico estudia casos concretos y sus resultados tienen vigencia en un lugar y tiempo específico.

Es intersubjetivo

Se apoya en la intersubjetividad, es decir, en hechos y creencias compartidos por varios individuos.

Etapas del método fenomenológico

El método fenomenológico puede dividirse en tres etapas: descriptiva, estructural y de discusión.

1. Etapa descriptiva

En esta etapa se realiza una aproximación al fenómeno u objeto de estudio utilizando distintos recursos y herramientas, como: observación o participación directa, uso de encuestas o cuestionarios, diálogos y entrevistas, etc. Se busca obtener una percepción lo más objetiva posible.

2. Etapa estructural

Se corresponde con el estudio o análisis de la información recogida u observada. Esto implica una revisión general del material, su clasificación, identificar problemas u objetivos, integrar la información y convertirla a un lenguaje científico.

3. Etapa de discusión y conclusiones

Se revisa y discute la información obtenida, contrastándola con la información recogida por otros investigadores o estudiosos y con el conocimiento que existía previamente, para alcanzar un nuevo conocimiento.

Ejemplos de aplicación del método fenomenológico

Proyecto para mejorar la atención de pacientes en un centro de salud

Un proyecto de esta clase implica varios pasos a seguir, que vamos a realizar siguiendo las etapas del método fenomenológico.

Descriptiva

Observación del movimiento del centro: recepción de los pacientes, pasos del personal administrativo, actividades de médicos y enfermeras; revisión de historias médicas, entrevistas a pacientes y a empleados del centro; encuestas en torno al trato y a los protocolos dirigidos a todos los involucrados.

Estructural

La información recopilada se revisa y clasifica en distintos niveles: críticas, elogios, sugerencias o recomendaciones; coincidencias y discrepancias entre los distintos grupos involucrados, etc.

En esta etapa puede considerarse la posibilidad de realizar un encuentro en el que todos los grupos de interés puedan intercambiar información, o ayudar a procesar y discutir la información recogida.

Discusión y conclusiones

Se reelaboran los resultados a partir de todo lo recogido en los pasos anteriores, y se compara la información con estudios similares en otros centros de salud, y con la bibliografía existente. Se presentan las conclusiones y recomendaciones.

Estudio de casos de bullying y acoso en un centro educativo

Evaluar qué herramientas son las más adecuadas en este caso. Por ejemplo: encuestas o charlas con los alumnos y docentes quizás no sirvan para detectar el problema, pero sí la observación directa o indirecta (utilizando estudiantes y docentes voluntarios), creando un buzón para recoger denuncias anónimas, etc.

Una vez localizados los puntos o focos de interés (víctimas y acosadores), seguir con entrevistas (alumnos involucrados, compañeros de clases, docentes, padres y representantes). Agregar a esta información la contenida en los expedientes de cada estudiante.

Una vez recogida esta información, organizarla del modo que parezca más pertinente: acosadores, víctimas, grados o secciones donde se presentan más casos, factores que pueden estar afectando a los involucrados (sociales, económicos, familiares, etc.).

Con la información organizada volver a entrevistarse con todos los miembros de la comunidad educativa.

En la tercera etapa comparar la información con otros casos de acoso escolar reportados, identificar principales causas y comenzar a proponer alternativas. En el caso de los centros educativos, en esta etapa ya deben estar comprometidos educadores, estudiantes y representantes.

Diagnósticos comunitarios participativos

A menudo los problemas que observamos desde afuera en una comunidad no son precisamente los que los miembros de la misma consideran más importantes. Por ello es recomendable involucrar a los vecinos cuando se va a hacer un diagnóstico de sus fortalezas y debilidades.

Además de trabajar con encuestas, entrevistas y asambleas donde todos intervengan, se pueden formar equipos para reconstruir la historia de la comunidad, hacer mapas parlantes o de autorreconocimiento y para evaluar los distintos servicios o problemas.

En este caso el análisis de la información, su clasificación y jerarquización puede hacerse en conjunto con los miembros de la comunidad. Y de la misma manera puede hacerse la tercera etapa: discusión, conclusiones y propuestas. El investigador puede proporcionar información externa y actuar como un facilitador u orientador.

Como herramienta de orientación vocacional

Es muy común que los adolescentes se aproximen al final de la secundaria sin tener claro qué quieren estudiar o hacer a continuación, y con mucho temor de equivocarse. En estos casos, el método fenomenológico puede ayudar, a través de entrevistas, autorreportajes y observación directa, a orientar al o la joven, o a darle pistas en torno a qué futuro desea para sí.

Otros ejemplos

El método fenomenológico puede utilizarse en distintos campos y aspectos de la vida: para identificar situaciones de violencia urbana o de género (especialmente cuando están concluyendo la secundaria); para evaluar y mejorar condiciones de trabajo en oficinas y empresas; para elaborar planes pedagógicos, etc.