Ansiedad

Atelofobia: qué es, síntomas, causas y tratamientos


¿Qué es la atelofobia?

La atelofobia constituye un tipo de fobia específica muy peculiar en la que la persona teme la imperfección y, sobre todo, ser imperfecto, no ser lo suficientemente bueno o no hacer las cosas correctamente.

A diferencia de otras fobias en las que el elemento temido suelen ser objetos o situaciones más específicas, en este caso el elemento temido radica en las interpretaciones subjetivas de imperfección.

Atendiendo a las características del elemento temido, la atelofobia puede constituir un tipo de fobia mucho más grave y discapacitante para la persona que la padece. Tiene que ver con el perfeccionismo y con la personalidad obsesiva.

¿Cuál es el elemento temido en la atelofobia?

El objeto fóbico de la atelofobia es lo que la persona considera como imperfecto, o no poder alcanzar la perfección en las acciones, ideas o creencias que se realizan.

A diferencia de otros tipos de fobias específicas, como la fobia a las arañas, la respuesta de ansiedad no aparece cuando la persona se expone a un estímulo concreto, sino que puede aparecer en cualquier momento en el que tenga pensamientos de imperfección.

Mientras que en una persona con fobia a las arañas se puede asegurar que no presentará respuesta de ansiedad siempre y cuando no haya arañas cerca, detectar cuándo puede realizar respuesta de ansiedad una persona con atelofobia resulta bastante más complicado.

No obstante, la persona con atelofobia realizará su respuesta fóbica en algunos momentos específicos. Por ejemplo, cuando el individuo fracase en algo, no realice bien una tarea o haga algo mal, muy seguramente realice una respuesta de ansiedad.

Sin embargo, la idea de imperfección es totalmente subjetiva, por lo que delimitar qué situaciones le provocarán fobia y qué situaciones no le provocarán suele ser prácticamente imposible.

De hecho, la persona con atelofobia puede responder con ansiedad ante una situación que otra persona identifique como perfecta, y al revés.

La única persona que será relativamente capaz de detectar cuáles son los estímulos que le pueden provocar ansiedad será el propio sujeto que padece el trastorno de ansiedad, ya que él será quien tendrá una mayor capacidad de reconocer sus pensamientos de imperfección.

¿Qué sucede cuando aparece un pensamiento de imperfección? Síntomas

La persona con atelofobia experimenta un miedo desproporcionado, irracional, involuntario y desadaptativo a las ideas de imperfección. Siempre que un individuo con esta afección es expuesto a una situación que le origina un pensamiento de imperfección, responderá con un estado de elevada ansiedad.

La reacción de ansiedad realizada en esos momentos afectará tanto el plano físico como el cognitivo y comportamental de la persona.

Plano fisiológico

– El individuo pondrá en marcha todo un conjunto de respuestas fóbicas que se caracterizan por un incremento de la actividad del sistema nervioso central.

– Incremento de la tasa cardiaca.

– Aumento de la respiración.

– Mayor sudoración y tensión muscular en todo el cuerpo.

Plano cognitivo

– La persona desplegará toda una serie de creencias sobre la situación temida y sobre su capacidad para afrontarla.

– Irrupción de pensamientos como que la imperfección es inadmisible, que no ser perfecto le acarreará muchos problemas o que nunca podrá estar bien porque no es perfecto, pueden aflorar con facilidad.

Plano conductual

– El individuo puede empezar a desarrollar una serie de comportamientos que le permitan evitar la respuesta de ansiedad y, por lo tanto, los pensamientos de imperfección.

Obsesión, rigidez y perfeccionismo

Es habitual que las personas con atelofobia se vuelvan extremadamente perfeccionistas, rígidas, obsesivas y autoexigentes.

La mayoría de los atelofóbicos miden sus propias competencias con los mejores, con el objetivo de poder evaluar la perfección de cada una de sus esferas personales.

Esto hace que continuamente estén tratando de afinar, rehacer o mejorar algo que ya está altamente considerado por quienes les rodean. Este patrón de funcionamiento suele originarles problemas en sus relaciones personales, en su desempeño laboral y familiar, y en la capacidad para integrarse en la sociedad.

Como vemos, estas repercusiones que presenta la atelofobia sobre el patrón de funcionamiento del individuo que la padece responde a conductas de evitación. Sin embargo, atendiendo a las cualidades del estímulo fóbico (la perfección), la evitación resulta mucho más grave.

La persona que tiene fobia a las arañas simplemente evitará estar en contacto o cerca de esos animales a los que tanto teme. 

Para una persona atelofóbica, evitar su estímulo temido resulta prácticamente imposible, por lo que en los intentos de evitar su fobia puede desarrollar un patrón de funcionamiento desadaptado y patológico.

Causas de la atelofobia

Como en todas las fobias específicas, se postula que las causas de la atelofobia se dividen entre componentes genéticos y componentes de aprendizaje.

Se propone que en el caso de la atelofobia, los estilos educativos recibidos durante la infancia, los patrones de funcionamiento de los educadores y los comportamientos a los que es expuesto la persona durante la infancia, juegan un papel importante.

Parece que los factores ambientales y el condicionamiento al que se expone la persona durante su desarrollo pueden dar lugar a la aparición de la atelofobia. Patrones educativos marcados por la autoexigencia, la perfección o la rigidez pueden resultar factores importantes en el desarrollo de atelofobia.

Asimismo, que los padres posean patrones de comportamiento marcados por la obsesión, la rigidez y la intolerancia a la imperfección, también pueden contribuir al desarrollo de un miedo extremo a no ser perfecto.

A diferencia de otras fobias, la atelofobia puede estar muy ligada a la confección de un tipo de personalidad específica.

Así pues, la fobia a la imperfección puede interpretarse desde una simple respuesta fóbica o desde un patrón de comportamiento, una forma de ser y tipo de personalidad determinado.

Este hecho puede verse reflejado en las repercusiones del trastorno, es decir, en el funcionamiento que provoca el hecho de tener fobia a la imperfección. No obstante, también resulta complicado delimitar cuál es la génesis de la patología.

Tratamiento

La primera opción de tratamiento de la atelofobia radica en esas intervenciones indicadas para las fobias específicas. Así pues, la psicoterapia encaminada a relajar y exponer a la persona a sus situaciones temidas, es decir, a las ideas de imperfección, constituyen el tratamiento de elección.

Se sustenta que si se consigue remitir la respuesta fóbica a través de la habituación a las ideas de imperfección, la persona podrá dejar de realizar sus conductas de evitación y, por lo tanto, remitir su comportamiento obsesivo, rígido y perfeccionista.

No obstante, este tipo de fobia a menudo puede provocar mayores problemáticas en su tratamiento.

Especialmente en esos casos en los que la personalidad obsesiva y perfeccionista se presente muy marcada, las técnicas de exposición y relajación pueden no resultar suficientes, ya que el individuo puede seguir empeñado en funcionar de una manera determinada.

Las alteraciones de personalidad suelen ser más difíciles de tratar. En esos casos, a pesar de que no se debe abandonar el tratamiento de la fobia, suele ser necesario incorporar otros tratamientos, como la terapia cognitiva o intervenciones farmacológicas.

Referencias

  1. American Psychiatric Association (1994). Diagnostic and statistical manual of mental disorders. Washington, DC: American Psychiatric Association.
  2. Capafóns, B.J. I. (2001). Tratamientos psicológicos eficaces para las fobias específicas. Psicothema, 13.
  3. Silverman, W. K. y Moreno, J. (2005). Specific Phobia. Child and Adolescent Psychiatric Clinics of North America, 14.