Anatomía y fisiología

Hueso hioides: qué es, funciones, enfermedades, fracturas


¿Qué es el hueso hioides?

El hueso hioides es un hueso impar, de tamaño mediano y completamente simétrico que se ubica en la parte anterior del cuello. Tiene como característica principal la ausencia de articulaciones con ningún otro hueso. Tiene la forma de un semicírculo con la concavidad del hueso hacia atrás.

Su cuerpo es arciforme y presenta unas estructuras llamadas cuernos hacia cada lado, en las que se ven sus asas mayores y menores. Su ubicación en la parte anterior y superior del cuello —a la altura de la tercera y cuarta vértebra cervical— lo relacionan por abajo con la laringe, por arriba con la lengua, y por arriba y parte anterior con la mandíbula.

El hueso hioides divide el cuello en dos regiones; una región suprahioidea y una región infrahioidea. En la región suprahioidea se encuentran los músculos digástrico, estilohioideo, milohioideo y genihioideo, que se insertan en la porción superior del hueso hioides.

En la región infrahioidea están los músculos esternocleidohioideo, omohioideo, esternotiroideo y tirohioideo, que se insertan en la porción inferior del hueso.

Este hueso se desarrolla embriológicamente a partir del segundo y tercer arco branquial, comienza su condrificación en la quinta semana y se completa en el cuarto mes de vida intrauterina.

Funciones del hueso hioides

Al servir de inserción para 8 pares de músculos, su función es actuar como punto de apoyo para la realización de las funciones específicas de cada músculo.

De esta manera, cuando los músculos suprahioideos se contraen descienden la mandíbula, pero para que el hueso hioides pueda servir como apoyo para la realización de esta acción, los músculos infrahioideos deben fijarlo firmemente.

Esta función de “palanca” permite la movilización del maxilar inferior y de ambos huesos temporales. Por su posición, protege parcialmente a la laringe y sirve de punto de apoyo a la lengua y a la laringe.

El hioides forma parte del denominado sistema estomatognático, como parte de los órganos, tejido y estructuras que permiten las funciones de deglución, fonación y respiración, así como algunas expresiones faciales, tales como besar o succionar.

Enfermedades relacionadas

Poco se conoce sobre las patologías que pudieran relacionarse con el hueso hioides, pues no se realizan estudios específicos a su anatomía en presencia de enfermedades que comprometan la deglución, la fonación y la respiración.

Algunos autores consideran una falta de juicio no dedicarle la atención necesaria a un hueso que forma parte de procesos tan importantes, y no justifican la falta de información acerca de las condiciones del hueso hioides en presencia de algunas patologías generales.

Sin embargo, más por casualidad se han descrito diferencias en la conformación ósea del hueso hioides: desde astas de diferentes tamaños hasta fusiones de las mismas, incluso fusiones cartilaginosas entre el cartílago tiroides y las astas del hioides.

  • En algunas literaturas se habla del hueso hioides como una osificación de 5 estructuras óseas diferentes, más débiles en los niños y cuya rigidez aumenta conforme aumenta la edad.
  • En la edad adulta se evidencia una sicondrosis entre los procesos laterales y el cuerpo del hioides, y se ha evidenciado en casos poco frecuentes la dislocación de sus partes ante contracciones violentas de los músculos del cuello.
  • Se ha descrito una dislocación anterior del cuerpo del hioides, en casos en los que la dislocación es producida por fuerzas que vienen de adentro hacia afuera (como al tragar un pedazo de comida sin masticar), y dislocación posterior del cuerpo del hioides, cuando la fuerza viene de afuera hacia adentro (como en un traumatismo).

Es por ello que en ancianos se ha evidenciado la osificación no solo del hueso hioides, sino también del ligamento estilohioideo, lo que impide la realización del rango de movimiento suficiente del hueso hioides para permitir la deglución y la fonación.

Posibles fracturas

Las fracturas de hueso hioides son excepcionalmente infrecuentes, cerca de 0,002 % del total de fracturas; esto es debido probablemente a la no fusión ósea de las partes del hueso hioides, que le confiere cierta facultad protectora ante traumatismos.

Se han descrito fracturas de hueso hioides aisladas, así como asociadas a fracturas mandibulares, en su mayoría debidas a accidentes de tránsito tipo arrollamiento.

Algunos casos de fracturas aisladas de hueso hioides se han descrito en hiperextensión cervical por “síndrome de latigazo” en accidentes viales, así como en maniobras de reanimación cardiopulmonar o de intubación endotraqueal por una hiperextensión cervical inadecuada.

Se han identificado fracturas de hueso hioides en traumatismos cervicales por mecanismo de estrangulación manual, específicamente en la sincondrosis entre el asta mayor y el cuerpo del hioides.

En la mayoría de los casos, la fractura del hueso hioides no representa un riesgo para la vida del paciente y suele manifestarse clínicamente por cuadros de disfagia aguda o de obstrucción respiratoria aguda secundaria a hemorragias faríngeas.

Usualmente el tratamiento para este tipo de fracturas aisladas de hioides consiste en mantener en observación al paciente para vigilancia de la vía aérea y la tolerancia oral, con limitación funcional con collarín blando.

Farmacológicamente se recomienda el uso de corticosteroides y analgésicos. El empleo de antibioticoterapia oral o endovenosa se individualizará en caso de cada paciente.