Derecho

Acción oblicua: qué es, características, elementos, ejemplos


¿Qué es la acción oblicua?

La acción oblicua o subrogatoria es una figura jurídica en donde los acreedores pueden cobrar a los deudores de sus deudores ejerciendo su derecho para cobrarse la suma adeudada. Gracias a este trámite, aquellos prestamistas de dinero pueden saldar sus deudas amparados por la ley.

Normalmente, esta figura de acción oblicua se ejecuta cuando hay un deudor negligente en sus pagos, es decir, que posiblemente tiene los medios para saldar su deuda, pero por algún motivo no lo hace, dando paso a la acción subrogatoria.

En la acción oblicua, el acreedor ejerce su derecho a cobrar la deuda solamente al deudor de su deudor, pero este último puede actuar directamente contra quien le deba dinero. En otras palabras, el prestamista aplica su derecho a cobro solamente a alguien que deba algún capital a su deudor.

Gracias a esta figura, un prestamista puede tener mayores posibilidades de recuperar algún dinero prestado, ya que no solo le cobraría a su deudor, sino que tiene la alternativa de cobrarle a alguien que deba dinero a su prestatario como tal.

Características de la acción oblicua

Entendiendo cómo funciona esta figura jurídica y cuál es su objetivo, es indispensable entender sus características, pues de esta forma se puede determinar cuándo usarla y cuándo no. Así, se tendrá clara la utilidad de la misma.

  • Una de las características más importantes de esta figura es que es una modalidad de cobro indirecto. Es decir, no se ejecuta el contrato de pago directamente al deudor, sino al deudor del deudor.
  • La acción subrogatoria es un modelo individual. Lo anterior hace referencia a que se aplica de forma particular al deudor y no de manera colectiva.
  • El aplicar la acción oblicua no requiere de una autorización judicial previa ni de algún permiso especial dado por la ley. Dicho trámite puede ser ejecutado por el acreedor directamente.
  • El hecho de hacer uso de la figura subrogatoria reconoce la insolvencia del deudor. En otras palabras, la figura se aplica cuando la situación financiera del prestatario refleja iliquidez o incapacidad de pago.
  • La acción oblicua está totalmente respaldada por la ley y es una forma completamente aceptada.
  • Esta forma jurídica puede ser aprovechada por múltiples acreedores, en caso de haberlos. Es decir, no aplica solamente a un solo prestamista o acreedor, sino a todos los que haya lugar y puedan tener interés en saldar alguna deuda con el deudor.
  • La figura jurídica de la acción subrogatoria es considerada una medida conservativa. Esto quiere decir que su objetivo principal es conservar, mantener o asegurar a futuro el derecho a que el acreedor recupere su dinero.

Elementos de la acción oblicua

Para que pueda hablarse de la acción subrogatoria y ejercerla correctamente como permite la ley, es fundamental saber cuáles son sus elementos o componentes. Así, se estará obrando en consonancia con lo que la normativa exige.

  1. Debe existir un deudor insolvente. Esto se refiere a que para que el acreedor pueda aplicar la figura de subrogación, el prestatario no tenga medios para hacer frente a su compromiso financiero.
  2. Que el deudor sea negligente o indiferente con el pago de la deuda que adquirió. Dicho de otra forma, que el prestatario no tenga intenciones evidentes de saldar su deuda con el acreedor.
  3. Que exista un contrato o documento soporte legal entre las partes para que pueda hacerse efectiva la figura jurídica de la acción oblicua. Esto es, que entre prestatario y prestamista haya un documento legalizado que pueda ser objeto de ejecución.
  4. La acción oblicua debe tener como esencia un derecho patrimonial. O sea, el centro de esta forma tiene facultades patrimoniales respecto al deudor.

Diferencias entre acción oblicua y acción pauliana

Como se ha mencionado antes, la acción oblicua es aquella que busca saldar una deuda, permitiendo al acreedor cobrar indirectamente su derecho al deudor de un deudor suyo. Sin embargo, existe otra figura que busca igualmente que el acreedor recupere su capital, como lo es la acción pauliana.

La acción pauliana es una figura jurídica en donde el acreedor puede revocar todas aquellas acciones que haya llevado a cabo el deudor para mostrarse insolvente y, por ende, no pagar su deuda. Es decir, esta figura permite que el acreedor anule por medios legales todas esas acciones que haya llevado a cabo el prestatario para mostrar incapacidad de pago.

Lo anterior busca que el acreedor pueda recuperar su capital invalidando todas aquellas posibles movidas financieras fraudulentas, como venta o traspaso de bienes, que haya hecho el deudor. Así, el acreedor tiene una alternativa más para poder recuperar su dinero y de alguna manera está protegiendo el capital a recuperar que le es adeudado.

La acción pauliana debe ejecutarse después de la oblicua o subrogatoria. Es decir, si el acreedor tiene la forma de aplicar primero la figura subrogatoria para recuperar sus dineros, debe hacerlo antes de recurrir a la forma pauliana.

Ejemplos de acción oblicua

Juan le debe a Pedro 5.000 euros, los cuales le fueron prestados para ser pagados en el plazo de un año. Juan paga cumplidamente las primeras cinco cuotas, pero luego de esto decide no volver a pagarle a Pedro ningún monto.

Pedro investiga cuál es el patrimonio de Juan, encontrando que tiempo atrás este había vendido un automóvil que nunca le fue pagado. Así, Pedro decide aplicar la acción oblicua al comprador del vehículo, quien aún tiene vigente esta deuda a Juan.

De esta forma, Pedro recupera su dinero al cobrar indirectamente su deuda a Juan.

María debe a Patricia 50.000 dólares, los cuales debían ser pagados en el plazo de 5 años. Al cabo de dos años en los que María pagó puntualmente su deuda, esta decide no volver a abonar la misma.

Días después, Patricia se entera de que María recibirá una herencia por la muerte de su abuela. Lo anterior le da bases a Patricia para que pueda ejercer la acción subrogatoria sobre este dinero que recibirá María, anticipándose así para que su deuda sea pagada.

Al aplicar esta figura sobre la herencia que recibiría María, Patricia logra indirectamente cobrarle y saldar su deuda.

Referencias

  1. CASTRO NOREÑA, M. J. (2019). Acción oblicua del acreedor en contra de los accionistas morosos de la sociedad deudora. Obtenido de ambitojuridico.com
  2. COCA GUZMÁN, S. J. (2020). ¿Qué es la acción oblicua o subrogatoria? Obtenido de lpderecho.pe
  3. La acción oblicua (2015). Obtenido de ecotec.edu.ec
  4. La acción oblicua (2018). Obtenido de datojuridico.com
  5. La acción oblicua como herramienta de protección de los derechos de los acreedores (2018). Obtenido de dspace.uniandes.edu.ec