Enajenación de bienes: concepto y ejemplos
La enajenación de bienes se refiere al hecho de vender cualquier activo a largo plazo, que se ha venido depreciando durante su vida operativa, tales como equipos de producción o edificaciones.
Después de cierto tiempo, algunos bienes que pertenecen a una empresa puede que ya no sean necesarios, por lo cual resulta importante tomar la decisión de enajenarlos. La eliminación de los mismos puede hacerse mediante la venta, reposición o abandono.
Según sea su depreciación, muchas entidades mantienen una política de enajenación de bienes para reemplazar sus equipos. Cuando las empresas los venden, obtienen un valor residual que puede ser una ganancia o una pérdida, según se tenga registrado en los libros contables.
La ganancia o pérdida por la enajenación de los bienes se debe presentar en el estado de resultados como parte del ingreso neto. También debe tenerse en cuenta que la compañía necesitará rebajar el monto del valor que quedó en el activo si no se llegó a reducir a cero por la depreciación.
Índice del artículo
- 1 Enajenación de bienes inmuebles
- 2 Enajenación de bienes patrimoniales
- 3 Enajenación de bienes embargados
- 4 Enajenación de bienes de dominio público
- 5 Ejemplo de enajenación de bienes
- 6 Referencias
Enajenación de bienes inmuebles
Significa legalmente el derecho de transferir estos bienes desde un patrimonio hacia otro, pudiendo deberse a un acto jurídico. Su entrega puede ocurrir en forma de compraventa, donación o renta.
Cálculo del impuesto a pagar
Se debe estipular primero el costo del inmueble. Así se obtendrá la ganancia con respecto a la cual se aplicará el correspondiente porcentaje. Esta es la fórmula del cálculo:
– Costo de venta – Costo computable= Ganancia adquirida.
Si el costo computable corresponde a obtenciones a título oneroso, como la compra del inmueble, será el importe de la construcción o adquisición, ajustado por el índice de corrección monetaria establecido por el órgano correspondiente, e incrementado con el monto de las mejoras incorporadas de forma permanente.
Si el inmueble se adquiere a título gratuito, como es el caso de una herencia, se tendrá como costo computable el importe de un auto-avalúo, reajustado por el índice de corrección monetaria aplicado al mes y año de obtención del inmueble.
Enajenación de bienes patrimoniales
Los bienes propios o patrimoniales son propiedad de una entidad y no están destinados al uso público ni a algún tipo de servicio público, pudiendo ser una fuente de ingreso para la entidad
Estos bienes están regidos por una legislación concreta, siguiendo las reglas del derecho privado. También se catalogan como bienes patrimoniales los efectos no utilizables previstos en el reglamento correspondiente.
A diferencia de los bienes de dominio público, que son inalienables mientras tengan esta naturaleza, los bienes patrimoniales se pueden enajenar, gravar, ceder gratuitamente, etc.
Enajenación a título oneroso
Los bienes patrimoniales se podrán enajenar como regla general por medio de una venta directa, habiendo arreglado previamente su valoración. Esta enajenación también podrá realizarse por subasta, a menos que se trate de un intercambio o de otros condicionales previstos legalmente.
En los casos donde la enajenación se refiera a terrenos incluidos como figuras residenciales, industriales o agrícolas, donde la entidad establecía las actividades, se podrá aprobar una ordenanza con las que se regirá su enajenación, convocando una subasta.
Enajenación de bienes embargados
Luego de que se embargan los bienes al contribuyente que no ha pagado su deuda tributaria, la administración tributaria debe enajenarlos. Sin embargo, antes debe proceder a realizar las actuaciones siguientes:
– Valoración de los bienes embargados, realizada por expertos independientes o por ella misma.
– Investigación de la existencia y valor de deudas anteriores.
– Fijación del valor mínimo de la subasta, de acuerdo a la valoración de los bienes y sus deudas.
– Se debe requerir al deudor los títulos de propiedad de los bienes.
– Formar varios lotes de naturaleza similar para conseguir una concurrencia mayor de licitadores.
– Finalmente, se deberá acudir al concurso, a la subasta pública o a la concesión directa. Sin embargo, el procedimiento común es la subasta.
Características de la subasta
El convenio de enajenación estipulado por el organismo de recaudación competente deberá incluir los bienes a subastar, datos del deudor y la clase de licitación.
La subasta será anunciada en los organismos pertinentes, con el siguiente contenido: lugar, día y hora, descripción de los bienes, títulos disponibles, compromiso de instauración del depósito, posibilidad de ofertar por vía telemática o en sobre cerrado, y cualquier otra circunstancia.
Enajenación de bienes de dominio público
Estos bienes se refieren a bienes del Estado destinados a satisfacer algún tipo de fin público. Para enajenar estos bienes se necesita gestionar el siguiente expediente administrativo:
– Valoración técnica del bien que acredite su precio justo. Referente a esto se debe considerar que no podrá adjudicarse por un precio mayor al valor máximo establecido al tipo de bien en cuestión.
– Legitimación de la secretaría donde se indique que el bien referido tiene titularidad pública y está suscrito en el registro de propiedad.
– Informe técnico que acredite que el bien a enajenar se encuentra dentro del patrimonio público, en conformidad con las normas.
– Certificación donde haya constancia del monto total de los recursos del presupuesto vigente, la valoración del bien a enajenar y el valor porcentual que representa este valor con respecto a aquel monto.
– Informe de Secretaría sobre el régimen legal aplicado y la adecuación del convenio al mismo.
– Si la valoración de los bienes a enajenar supera el 25% de los recursos del presupuesto, se deberá conseguir la autorización pertinente del organismo competente.
– Luego de cumplir los requisitos anteriores, el organismo competente adoptará el convenio de enajenación y las cláusulas administrativas específicas.
Ejemplo de enajenación de bienes
Cuando se enajena un bien para venderlo por un monto diferente al que aparece en los registros contables, se deberá hacer un ajuste en la cuenta de ingreso neto del estado de resultados.
Por ejemplo, supongamos que la empresa vende uno de sus camiones por $3.500. Ese camión se muestra en los registros de la compañía a su costo original de $22.000 menos su depreciación acumulada de $19.500.
Cuando se combinan estos dos montos, el importe neto se conoce como el valor en libros del activo. Es decir, el valor en libros del camión es $2.500 ($22.000-$19.500).
Como el efectivo recibido debido a la venta del camión fue de $3.500 y el valor en libros era de $2.500, la diferencia de $1.000 se registra en la cuenta “Ganancia por la Venta del Camión”, una cuenta del estado de resultados que incrementa los ingresos netos de la compañía.
Si el camión se hubiera vendido por $1.000, que son $1.500 menos que su valor en libros de $2.500, esta diferencia de $1.500 se informaría en la cuenta “Pérdida por la venta del camión”, reduciendo los ingresos netos de la compañía.
Referencias
- Harold Averkamp (2020). Disposal of Assets. Accounting Coach. Tomado de: accountingcoach.com.
- Strategic CFO (2020). Asset Disposal Definition. Tomado de: strategiccfo.com.
- Rankia (2019). ¿Qué es la enajenación del inmueble? Tomado de: rankia.pe.
- Super Contable (2020). La enajenación y adjudicación de los bienes embargados por la administración tributaria. Tomado de: supercontable.com.
- Contraloría del Poder Legislativo (2014). Procedimiento para la enajenación de bienes muebles e inmuebles de las entidades municipales. Tomado de: contraloriadelpoderlegislativo.gob.mx.