Derecho

Concubinato: concepto, características, efectos legales


¿Qué es un concubinato?

El concubinato es una relación entre un hombre y una mujer que tienen la intención de permanecer juntos por un largo tiempo, pero sin tratarse de un matrimonio. Son parejas que cohabitan aunque prescinden de las formalidades y también de los beneficios del matrimonio convencional.

Al definir el concubinato se hace referencia a una duración en el tiempo que supone que se generen consecuencias jurídicas en distintos ámbitos de la vida de los sujetos. Se trata de aspectos relacionados con el patrimonio, relaciones paterno filiales y personales.

El concubinato ha sido una práctica habitual y reconocida en muchas culturas a lo largo de la historia, aunque normalmente las concubinas no tenían la protección legal de las mujeres casadas en matrimonio. En religiones como el Islam se admitía el concubinato y en la clase muy alta existían los harenes.

Las concubinas que habitaban en estos no tenían muchos derechos particulares, pero sus descendientes sí que tenían algunos derechos de propiedad. Actualmente es muy común que las parejas cohabiten sin tener interés por formalizar la unión mediante el matrimonio civil o religioso.

La razón que tienen muchas personas de preferir esta opción en lugar de las anteriores se fundamenta en el rechazo al compromiso y en el deseo de eximirse de obligaciones y responsabilidades que vienen incluidas dentro de las formas convencionales de unión en el ámbito de las relaciones de pareja.

Antecedentes (derecho romano)

El concubinato en la antigua Roma tiene elementos muy particulares, a la vez que interesantes. Uno de estos elementos es el requisito de monogamia; es decir, en principio en la antigua Roma no se podía estar casado y tener una concubina al mismo tiempo. Tampoco se podía tener más de una concubina a la vez.

Lógicamente esta era la teoría, ya que no siempre se cumplía este requisito de monogamia. Si había poligamia, la esposa podía demandar a su marido si hablaba de nuevo con su exconcubina.

Los juristas de finales del siglo II y principios del III afirmaban que un hombre no podía acusar a su concubina de adulterio de la misma manera que lo podía hacer un esposo.

Curiosamente, él podría acusarla como un tercero (es decir, no como perjudicado), pero solo si ella no había perdido el título de matrona al convertirse en su concubina.

Si ella hubiera renunciado a ese estado, se supone que no se pudo haber cometido adulterio, ya que no tenía ningún honor que perder.

Normalmente las concubinas tenían un estatus inferior (aunque no siempre) y esto significaba que dependían económica y socialmente de su patrón, al menos parcialmente. Esto no implica que todas las parejas casadas eran monógamas, simplemente que se suponía que debían serlo.

Derecho romano

El derecho romano contempla y regula el concubinato, aunque solo se puede estudiar lo que quienes redactaron la ley pensaban que era el ideal y los temas concretos por los que estaban especialmente preocupados.

En este derecho aparece la monogamia como el ideal, pero no funcionaba en la práctica como se deduciría de una interpretación literal de la ley, especialmente en situaciones que involucran a una concubina.

Características del concubinato

El concubinato tiene las siguientes características:

Cohabitación

Es la característica esencial del concubinato. Cuando las partes no comparten domicilio, no podemos considerar que exista un concubinato.

Vivir juntos significa que la pareja compone una comunidad y, como tal, se producen situaciones que precisan la intervención o regulación legal.

Singularidad

Supone que todos los factores que conforman el concubinato tienen que estar presentes únicamente entre los dos sujetos. Sin embargo, no desaparece la singularidad porque algunos elementos aparezcan con otros sujetos que no sean parte en el concubinato.

Permanencia

Tiene que existir un factor temporal; es decir, no puede ser una relación ocasional o de corto recorrido en el tiempo. Es tan importante esta característica que si la relación de pareja no tiene cierta duración en el tiempo, no se considera concubinato.

Al igual que en el matrimonio, pueden darse periodos de separación y cortas rupturas sin que resulte afectado el elemento de permanencia característico del concubinato.

Notoriedad

La relación entre los sujetos del concubinato tiene que ser pública, no secreta. Si no se da esta circunstancia puede afectar a las consecuencias jurídicas de la unión.

Efectos legales del concubinato

Cuando se produce una unión entre dos personas que dura a lo largo del tiempo es inevitable que surjan efectos legales en distintos ámbitos de la vida en sociedad. Sin embargo, el concubinato por sí solo no devenga consecuencias jurídicas.

Propiedades

La legislación vigente no regula o contempla que este tipo de relaciones en concreto produzcan efectos jurídicos. A pesar de esto, cuando una pareja convive durante años es muy probable que adquieran propiedades con recursos de ambas partes.

Por eso, para ahorrar problemas posteriores y posibles demandas, es muy conveniente crear algún tipo de sociedad entre la pareja que regule los bienes adquiridos en un tipo de copropiedad amparada por la ley.

Filiación

Con relación a los hijos fruto de una relación de concubinato o posterior a la misma, se someten a la normativa de reconocimiento voluntario de la paternidad.

En caso de que no se realice ese reconocimiento, es preciso que se inicie una acción legal a través de la cual se pueda comprobar el concubinato de la madre con el posible padre en el momento del embarazo. Es decir, se tiene que establecer la certeza de la pareja para determinar la posible paternidad.

Lógicamente, se emplean también otros mecanismos de prueba además de la presunción de paternidad derivada de la relación de concubinato con el presunto padre, como pruebas de ADN, que son muy fiables en cuanto a sus resultados.

Pensión alimenticia

Una relación de concubinato concluida puede derivar en la obligación de abono de pensión alimenticia por una de las partes, bien sea el padre o la madre.

Son obligaciones que tienen su origen de alguna forma en el concubinato, aunque no estén contempladas exactamente.

Aspectos positivos y negativos del concubinato

Aspectos positivos

  • Puede ser importante e interesante vivir como un matrimonio antes del matrimonio legal (religioso o civil), como una forma de asegurarse de que la pareja elegida es la persona con la que deseas pasar el resto de la vida.
  • Estadísticamente, el número de divorcios está aumentando; de hecho, cuatro de cada diez matrimonios terminan en ruptura. Quizás opciones como el concubinato pueden reducir el porcentaje de divorcios.
  • El concubinato supone un mayor rango de libertad.

Aspectos negativos

  • Es posible que exista un menor compromiso por parte de la pareja en comparación con el matrimonio.
  • Puede significar menor estabilidad para la pareja.

Referencias

  1. Emily Kittell-Queller. (2013) Roman concubinage and monogamy. Emilykq.weebly.com
  2. Merriam Webster. Legal definition of concubinage. Merriam.webster.com
  3. Get revising. Aspects positifs et negatifs du concubinage. Getrevising.co.uk
  4. Mis abogados. (2016) ¿Qué es el concubinato?. Misabogados.com.mx
  5. Matos Mateo & Asociados Abogados. Acerca del concubinato. matosmateo.com