Anatomía y fisiología

Músculo subescapular: características, funciones, síndromes


El músculo subescapular forma parte del manguito de los rotadores. Por tanto, brinda estabilidad a la articulación del hombro (glenohumeral), junto a los músculos supraespinoso, infraespinoso y redondo menor.

Mientras los músculos supraespinoso, infraespinoso y redondo menor sujetan a la articulación glenohumeral por la parte superior y posterior, el subescapular lo hace por la parte anterior.

Cabe destacar que la estabilización del hombro por la cara anterior no es solo función del músculo subescapular, también participan otras estructuras como el ligamento coracobraquial, la propia cápsula anterior y los ligamentos de la articulación glenohumeral, tanto superior, medio e inferior.

La participación del músculo subescapular en la estabilización del hombro, está circunscrita a generar una tensión excéntrica, que regula el movimiento de traslación anterior (slide). Esta función es posible gracias a los puntos estratégicos de origen e inserción.

Otras funciones del músculo subescapular, aparte de estabilizar la articulación glenohumeral, es la de colaborar en la rotación interna del hombro. También, dependiendo de la posición de la articulación, participa en el movimiento de abducción, flexión, extensión y depresión.

El músculo subescapular se origina en la parte anterior del omóplato o escápula, específicamente en la fosa que lleva su mismo nombre «subescapular» y se extiende hasta la cabeza del húmero, insertándose en mayor proporción en el tubérculo menor, mientras una pequeña porción lo hace en el tubérculo mayor.

El músculo subescapular es el más fuerte de los 4 mencionados, y por este motivo la tendinitis del subescapular es difícil de diagnosticar, dando signos positivos solamente cuando está gravemente lesionado.

Índice del artículo

Características

El músculo presenta una forma triangular, bordes gruesos y cuerpo ancho.

Origen

El músculo subescapular se ubica en la parte anterior de la escápula, originándose en la fosa subescapular, específicamente en la zona costal. El cuerpo o vientre del músculo cubre la fosa subescapular. El músculo pasa por encima de los músculos del dorso.

Inserción

El músculo se inserta en la porción anterior de la cabeza humeral, cuya zona es denominada tubérculo menor o troquín.

Inervación

El músculo subescapular es inervado por dos nervios y debido a ello se le divide en dos secciones, fibras upper-subscapularis y lower-subscapularis, es decir, fibras superiores e inferiores del subescapular.

La primera porción está inervada por el nervio subescapular superior (C5-C6) y la segunda por el nervio subescapular inferior (C5-C6). Ambos nervios provienen del plexo braquial.

Irrigación

Este músculo posee una alimentación sanguínea a cargo de la arteria cervical transversa y la arteria subescapular principalmente. Sin embargo, un trabajo publicado por Naidoo y cols. demostró que existen variaciones anatómicas entre un individuo y otro. Para ello estudiaron 100 cadáveres y observaron lo siguiente:

En 96% de los casos el músculo subescapular era irrigado por la arteria subescapular, en 39% por la arteria toracodorsal (rama de la arteria subescapular interna), 36% por la arteria supraescapular, en 14% por la arteria torácica lateral y en 9% por la arteria circunfleja escapular (rama de la arteria subescapular).

Funciones

Es un coaptador de la articulación glenohumeral, es decir, contribuye junto a otros músculos a que la cabeza del húmero se mantenga estable dentro de la cavidad glenoidea a pesar de los movimientos. La función de sostén la cumple desde la cara anterior de la articulación glenohumeral.

Por otra parte, una de sus funciones principales es la de colaborar con el movimiento de rotación interna del hombro, función que ejerce junto a otros músculos cercanos, tales como: fibras esternales del pectoral mayor, redondo mayor y dorsal ancho.

Sin embargo, la rotación interna del hombro no es la única función que ejerce, pues según la posición que adopte la cabeza humeral en relación a la escápula el músculo subescapular puede colaborar como: abductor, extensor, flexor y depresor.

Se cree incluso que pueda ayudar en el movimiento de rotación externa en algunas posiciones, debido a la inserción conjunta que posee con los músculos supraespinoso e infraespinoso.

Algunos autores opinan que el músculo subescapular en la posición de abducción a 90° a nivel del omóplato, ejerce una fuerza equivalente a la del infraespinoso y 2,5 veces mayor a la del supraespinoso.

Por otra parte, la función del músculo subescapular se puede dividir de acuerdo a la zona, es decir, la parte superior del músculo cumple una función y la inferior otra.

En este sentido, Ackland et al citado en Collard y colaboradores, aseguran que la parte superior del músculo subescapular es la que más favorece el movimiento de rotación interna; obteniendo un punto máximo a los 30° de flexión y abducción en la articulación.

Mientras que, la parte inferior se encarga específicamente de la estabilización de la articulación posterior, contrarrestando la traslación anterior.

Síndromes

Una de las afectaciones más comunes que ocurren en los músculos que conforman el manguito de los rotadores es la lesión del músculo subescapular. La lesión se puede producir por contracción del músculo (acortamiento) o estiramiento exagerado (alargamiento).

Si el músculo se tensa pueden aparecer puntos gatillo, que producen dolor, lo cual es fácilmente corregible con descanso y masajes.

Sin embargo, este puede ser el inicio de otras situaciones más complicadas, que pueden generar dolor crónico.

La ubicación del músculo le confiere una situación peculiar, ya que de los cuatro músculos el subescapular es el único que se posiciona en la parte anterior de la escápula. Por tanto, su función de coaptador de la cara anterior de la articulación glenohumeral no puede ser suplida por el resto de los músculos.

En todo caso, otros músculos cercanos como el pectoral mayor, el redondo y el dorsal ancho pueden asumir de forma dominante el movimiento de rotación interna, pero estos no son coaptadores de la articulación glenohumeral.

En este sentido, si el músculo se torna débil o se alarga, el refuerzo de la articulación glenohumeral por su parte anterior se verá amenazada, quedando solo a expensas de la cápsula articular y de los ligamentos coracobraquial y glenohumeral, de menor fuerza.

Esta situación origina un deslizamiento anterosuperior exagerado, síntoma que precede al síndrome subacromial.

– Tendinitis del subescapular

En la rotación externa, lo normal que debe ocurrir es que los músculos rotadores externos se contraigan, mientras que el subescapular se estira. Las fuerzas encontradas generadas a ambos lados de la articulación es lo que le brinda estabilidad a la cabeza humeral en la cavidad glenoidea.

Sin embargo, el músculo subescapular se puede debilitar o alargar como consecuencia de una rigidez o acortamiento en los músculos rotadores externos.

Esto provoca una limitación en la rotación interna, pues el esfuerzo que realiza el músculo subescapular durante la rotación externa bajo esta circunstancia, hace que se estire demasiado y con el tiempo se debilite.

Otros factores que pueden lesionar el músculo se encuentran en: la adopción de malas posturas, el uso excesivo de la articulación del hombro, movimientos bruscos sin precalentamiento, posiciones estáticas por tiempo prolongado o enfermedades previas degenerativas como la artritis, entre otras. Pueden coexistir varias causas al mismo tiempo.

Signos y síntomas

La mayoría de los desgarros ocurre a nivel de la unión del tendón con el hueso (unión tenoperiosteal). Esta afectación produce dolor en la zona posterior del brazo y ocasionalmente el dolor puede irradiarse hacia la muñeca.

Así mismo, un desgarro del músculo subescapular a nivel del vientre muscular produce dolor a nivel de la escápula, pero este no es frecuente.

Por lo general, el desgarro es subsanado de forma natural con tejido cicatrizal, pero este se rompe con facilidad con un esfuerzo moderado. Si esta situación es repetitiva el músculo se debilita y se vuelve doloroso.

Dependiendo de la causa los síntomas pueden aparecer paulatinamente o bruscamente. En casos de progresión lenta, el paciente principalmente se queja de dolor al levantar el brazo por encima del hombro, sea cual sea la actividad que realice.

En los casos agudos el problema se presenta después de un movimiento brusco, produciendo molestias fuertes con simples maniobras, como por ejemplo: abrir una puerta o desenroscar una tapa.

Si no se corrige el problema puede producir un hombro congelado (sin movimiento) o problemas de artrosis.

También la lesión del subescapular puede presentarse en forma conjunta con una luxación de la articulación del hombro. En este caso el dolor puede perdurar por meses.

– Exploración del músculo subescapular

Rotación resistida

Se le pide al paciente que realice un movimiento de rotación resistida y, si existe dolor, significa que el músculo subescapular está afectado.

Prueba de Gerber

Para ello se posiciona el brazo por detrás de la espalda del paciente. El codo debe estar flexionado en 90°. Luego se trata de resistir el movimiento de rotación interna y se observa si hay dolor.

– Tratamiento

Aunque es muy difícil palpar el músculo, se pueden realizar algunos masajes que pueden aliviar el dolor.

Existen dos técnicas de automasajes, la primera denominada presión–movimiento, la cual consiste en tocar el músculo y explorar las zonas de dolor, mientras se realiza la rotación interna y externa de la articulación del hombro de forma repetida.

Mientras que la segunda se denomina técnica del pulgar. Se coloca el pulgar en una zona inmediata al punto de dolor para comenzar a dar un masaje sobre este de forma repetida.

También es muy útil realizar ejercicios de estiramiento.

Trastornos relacionados

Síndrome de pinzamiento subacromial

También se le conoce como tendinitis del manguito de los rotadores o impingement. Es una afectación muy común en pacientes jóvenes.

Se desarrolla en tres etapas:

1) Edema e inflamación del músculo afectado.

2) Compresión del manguito de los rotadores por fibrosis y engrosamiento la bolsa serosa suacromiodeltoidea.

3) Rotura parcial o total de los músculos que conforman el manguito de los rotadores, pudiendo estar implicado el músculo subescapular.

Referencias

  1. «Músculo subescapular»  Wikipedia, La enciclopedia libre. 15 ago 2018, 23:21 UTC. 9 sep 2019, 19:31 org/
  2. Collard P, Pradere M, Rusquet A. El papel del músculo subescapular en la estabilidad anterior glenohumeral. Trabajo especial de grado para la obtención del título de fisioterapia. 2017-2018. Disponible en: eugdspace.eug.es
  3. Naidoo N, Lazarus L, De Gama B. Z, Ajayi N. O, Satyapal K. S. Arterial Supply to the Rotator Cuff Muscles. J. Morphol. 2014; 32 (1): 136-140. Disponible en: scielo.conicyt.
  4. Saldaña E. (2015). Manual de anatomía humana. Disponible en: oncouasd.files.
  5. Pereira V, Escalante I, Reyes I, Restrepo C. Asociación de síndrome de pinzamiento subacromial y lesiones parciales intrarticulares de hombro. Academia Biomédica Digital VITAE. 2006; 28 (1): 1-16. Disponible en: vitae.ucv.ve