Vida saludable

Fumador activo: definición, características y consecuencias


¿Qué es un fumador activo?

Un fumador activo es la persona que consume tabaco de forma directa. A diferencia de los fumadores pasivos, que tan solo reciben las consecuencias negativas de esta droga por encontrarse cerca de una fuente de humo de tabaco, los fumadores activos deciden libremente someterse a esta sustancia.

Todos conocemos las nocivas consecuencias del tabaco. En los últimos años, los medios de comunicación, los organismos públicos e incluso las tabacaleras han comenzado a advertirnos de lo que puede ocurrir en nuestro cuerpo si fumamos de manera habitual.

Sin embargo, incluso a día de hoy muchas personas continúan siendo fumadores activos. En este artículo veremos exactamente qué significa esto, qué consecuencias tiene fumar para nuestra salud, y en qué se diferencia exactamente un fumador pasivo de un fumador activo.

Características del fumador activo

Consume tabaco directamente

El fumador activo es aquella persona que consume tabaco libremente y de manera directa, por contraposición al fumador pasivo, que es aquel que recibe el humo del tabaco por encontrarse cerca de una persona que fuma.

Varias formas de consumir

El fumador activo puede consumir tabaco de diferentes maneras: en cigarrillos, puros, pipa, o vaporizador, entre otros. A pesar de que las consecuencias de cada una de las vías de consumo varían ligeramente, en todas ellas son extremadamente nocivas para la salud.

Posibilidad de adicción

Los fumadores activos son los únicos que pueden volverse adictos al tabaco, ya que la nicotina solo hace efecto al ser consumida directamente. Algunos estudios han investigado sobre la posible adicción a la nicotina en fumadores pasivos, pero los resultados han sido inconcluyentes.

Frecuencia

La frecuencia con la que un fumador activo consume tabaco varía enormemente de una persona a otra. Mientras que algunos solo toman un cigarrillo de vez en cuando (como sería el caso de los “fumadores sociales”), otras personas pueden llegar a fumar varios paquetes de tabaco al día.

Evidentemente, cuanto más tabaco se consuma, peores serán las consecuencias para la salud. A continuación veremos algunas de las más graves de ellas.

Consecuencias de ser fumador activo

El tabaco es una de las sustancias aceptadas por la sociedad más perjudiciales para nuestro organismo. A pesar de que durante varias décadas las tabacaleras trataron de desacreditar las investigaciones que relacionaban el consumo del tabaco con todo tipo de enfermedades, hoy sabemos que esta sustancia tiene infinidad de consecuencias nocivas.

Adicción

Una de las consecuencias más llamativas del tabaco es la adicción que provoca. La nicotina, uno de los componentes principales de esta sustancia, altera el cerebro de tal forma que éste necesita una dosis cada vez mayor para funcionar correctamente.

Lo curioso es que, a diferencia de otras sustancias, la nicotina no provoca adicción haciendo sentirse bien a la persona que la consume. Por el contrario, la vía por la que se genera la adicción es haciendo que la persona se sienta muy mal cuando no está consumiendo nicotina.

Cáncer

Quizás una de las consecuencias más impactantes del tabaco sea su relación con el cáncer. Esta enfermedad, que aún hoy en día continúa siendo muy difícil de curar y se ha convertido en una de las principales causas de muerte en el mundo, tiene muchas más probabilidades de aparecer en un fumador activo.

El tabaco se relaciona con todo tipo de cáncer debido a sus efectos nocivos sobre las células de nuestro organismo, pero sobre todo tiene que ver con el cáncer de pulmón, de garganta y de lengua.

Enfermedades circulatorias

El consumo de tabaco en cualquier forma también se relaciona con todo tipo de enfermedades del corazón. Debido a que eleva la tasa cardíaca, y a que se produce un endurecimiento de las venas al fumar, el corazón tiene que trabajar mucho más intensamente para hacer circular la sangre.

Esto puede tener desde consecuencias leves, como un mayor cansancio o mala circulación en las extremidades, hasta efectos devastadores como ataques al corazón o infartos cerebrales.

Problemas reproductivos

Uno de los principales sistemas afectados por el tabaco es el sistema reproductivo. Multitud de estudios confirman que fumar tiene efectos muy negativos sobre la fertilidad, la libido o la función sexual.

Algunas de estas consecuencias son las siguientes:

  • Disminución del deseo sexual tanto en hombres como en mujeres.
  • Pérdida de erecciones en hombres.
  • Disminución de la fertilidad en ambos sexos.
  • Aumento del riesgo en el embarazo para las mujeres.
  • Mayores probabilidades de tener un hijo con problemas en el momento del nacimiento.

Disminución de las defensas

Por último, el consumo de tabaco de forma activa se ha relacionado con prácticamente todas las enfermedades del mundo, debido a su papel en la debilitación del sistema inmunitario del cuerpo.

Al afectar y hacer más débiles las defensas de nuestro organismo, los fumadores activos tienen más probabilidades de contraer todo tipo de enfermedades.

Esto se suma a todos los demás efectos negativos del tabaco, convirtiéndolo en una sustancia especialmente peligrosa.

Diferencias entre fumador activo y fumador pasivo

A continuación veremos las principales diferencias entre un fumador pasivo y uno activo, para entender mejor de qué manera afecta el tabaco a cada uno de ellos.

Exposición involuntaria

La principal diferencia entre un fumador pasivo y uno activo es que el primero no elige estar expuesto al tabaco, sino que lo hace solo por estar en contacto con personas que fuman.

Estas personas pueden pertenecer a su círculo social, pero también ser simplemente gente con la que coinciden en un mismo espacio.

Adicción

La segunda diferencia más importante entre ambos tipos de fumadores es que los pasivos no pueden llegar a volverse adictos a la nicotina, simplemente porque esta sustancia no llega a entrar en su cuerpo. Para consumirla, es necesario fumar directamente el tabaco, en lugar de tan solo aspirar el humo.

Menores consecuencias para la salud

A pesar de que cualquier tipo de exposición al tabaco es perjudicial, los efectos de inhalar el humo son mucho menos peligrosos para la salud que los de fumar cigarrillos, puros o vaporizadores de manera habitual.

Sin embargo, estar expuesto al humo del tabaco de manera continua también puede aumentar los riesgos de tener cáncer, sufrir enfermedades del corazón o sufrir una disminución de las defensas. Por ello, muchos países del mundo están prohibiendo el consumo del tabaco en lugares públicos.