Realismo literario español: qué es, contexto, géneros, autores y obras
¿Qué es el Realismo literario español?
El Realismo literario español es una corriente literaria surgida en España a mediados del siglo XIX, caracterizada por describir las situaciones sociales de una manera objetiva, tal como las veían los autores. Surgió como rechazo al movimiento romántico.
El Realismo fue un movimiento que surgió en Francia, en respuesta a la explosión romántica en la poesía y las artes en general. Los artistas se cansaron de la subjetividad y quisieron plasmar lo más objetivamente posible la realidad, muchas veces desagradable.
Los escritores y autores de las principales novelas realistas del siglo XIX eran considerados “historiadores del presente”, y eran obras fundamentalmente de carácter social. Benito Pérez Galdós, Emilia Pardo Bazán o Leopoldo Alas “Clarín” son algunos de los representantes del Realismo literario español.
Contexto histórico
El siglo XIX en España fue realmente convulso. No solo sufrió la invasión napoleónica, sino que en el transcurso de estos 100 años perdió todas las colonias americanas con las luchas independentistas.
Fernando VII e Isabel II fueron depuestos, cada uno en su momento, y eso se tradujo en una crisis política que perduró durante el XIX. A finales de siglo, España perdería Cuba y Filipinas.
Con la Revolución de 1868, también conocida como La Gloriosa, se inició un nuevo periodo político. Francisco Serrano y Domínguez se convirtió en presidente del Consejo de Ministros, mientras que Amadeo de Saboya, conocido como “el rey electo”, reinó el país por un breve periodo, entre 1871 y 1873.
Un tiempo más tarde se restableció la dinastía de los Borbones, con la instauración de la I República, periodo que duró un año, de 1873 a 1874. Fue el hijo de la depuesta Isabel II, Alfonso XII, quien presidió la monarquía española por diez años, hasta 1885.
Al morir el rey, la reina consorte María Cristina asumió la regencia hasta 1902, cuando su hijo, Alfonso XIII, fue nombrado rey.
Todos estos acontecimientos marcaron a los artistas. La expresión más acabada del Realismo español fue la novela, género de gran tradición en el país. A partir de la segunda mitad del siglo, la novela realista adquiere una gran importancia, también derivada del auge del movimiento a nivel internacional.
La realidad social fue plasmada en las distintas obras como expresión de la naciente burguesía, que poco a poco se hizo del poder.
Características del Realismo literario español
– Objetividad: se presenta la realidad de manera objetiva. Se dejó de lado la apreciación personal y los hechos fantásticos propios del Romanticismo para escribir desde la observación. Los cambios reales que se dieron en la cultura española eran tratados con la mayor fidelidad.
– Lenguaje coloquial: se utilizó un lenguaje cercano a la gente, alejado de cultismos, con el objeto de que fuera comprendido por todos. Esto permitió que la mayoría de la sociedad tuviera acceso a la nueva cultura, y al mismo tiempo comprendiera los acontecimientos que ocurrían.
– Temas cotidianos: los temas que se desarrollaron eran propios de la cotidianidad. El lector podía sentirse identificado. La defensa de los derechos, la libertad, el matrimonio, eran puntos que se ampliaron muy a menudo.
– Crítica social: cada autor expuso lo que consideró era dañino para la gente, aportando soluciones desde su punto de vista. Es lo que se llamó “novela de tesis”, en la que el autor defendía su punto de vista y lo que consideraba correcto. Es importante destacar que lo hicieron como narradores omniscientes, conocían la psicología de los personajes y todos los hechos.
– Detalladamente descriptivos: los ambientes donde se desarrollaron las acciones eran descritos con abundantes detalles, para dar cuenta de esa realidad que querían demostrar.
– Personajes burgueses: los autores preferían a sus protagonistas de clase media, normales, pequeños comerciantes, en contraposición a los héroes románticos y a los rebeldes que luchaban contra todo.
Géneros, autores y obras representativas
Los principales géneros del Realismo literario español fueron la novela, la poesía y el teatro. A continuación se describen cada uno, con sus principales autores y obras.
Novela
Fue su auge lo que le dio forma a la corriente literaria. Desarrolló temas de interés social, y su lenguaje permitió que toda la sociedad tuviera acceso a ella. Fueron varios los autores que alcanzaron renombre en España a través de la novela.
Su florecimiento se debió tal vez a que fueron publicadas por capítulos en los principales diarios y periódicos del país.
Benito Pérez Galdós (1843-1920)
Fue novelista, dramaturgo, cronista y político. Nació en Las Palmas de Gran Canarias y murió en Madrid. Se le ha considerado como el autor más destacado del Realismo español. Fue defensor del republicanismo como la mejor forma de gobierno.
Entre sus obras más importantes están: Los episodios nacionales, Doña Perfecta, Marianela o La familia de León Roch, Gloria, Novelas españolas contemporáneas, Fortunata y Jacinta, y Misericordia.
Juan Valera (1824-1905)
Fue escritor, político y militar. Aunque inicialmente rechazó tanto al Romanticismo como al Realismo, más tarde aceptó al segundo porque le permitió escoger espacios reales para desarrollar sus obras. Entre sus obras destaca Pepita Jiménez (1874).
Leopoldo Alas “Clarín” (1852-1901)
Se desempeñó como profesor y catedrático. Además de eso, trabajó en varios periódicos como crítico literario. Su principal obra fue La Regenta (1884-1885).
Emilia Pardo Bazán (1851-1921)
Fue una mujer con una extraordinaria cultura, producto de sus lecturas y sus viajes. Para ella se abrió una cátedra de Literatura en la Universidad de Madrid. Escribió obras importantes, como La cuestión palpitante, pero su obra más realista y naturalista fue la novela La tribuna, donde describe las duras condiciones de una fábrica de tabaco.
Otros
También fueron autores realistas Vicente Blasco Ibáñez, con Los cuatro jinetes del Apocalipsis, Luis Coloma, con Pequeñeces, o Armando Palacios Valdés, con La hermana de San Sulpicio, La aldea o Marta y María.
Teatro
El teatro realista español se desarrolló dentro de patrones conservadores, hasta plantear las más fuertes inquietudes de una sociedad que se recuperaba de la decadencia. Con las puestas en escena se recuperaron las costumbres perdidas.
Entre los representantes de más renombre estuvieron: Manuel Tamayo y Baus, Eugenio Sellés, José Echegaray, Leopoldo Cano, Enrique Gaspar y José Feliú y Codina.
Manuel Tamayo y Baus (1829-1898)
Fue un dramaturgo hijo de actores, y decidió continuar con el legado familiar. Creció dentro de la compañía de teatro de sus padres. Incursionó en el movimiento romántico, y luego en el realista.
Las siguientes son sus obras más destacadas: Locura de amor, La bola de nieve, Lo positivo, Lances de honor, Los hombres de bien y Un drama nuevo, esta última su obra más importante.
José Echegaray (1832-1916)
Se destacó como escritor, dramaturgo, político y matemático. Su obra resultó ser costumbrista y de situaciones trágicas.
Todo eso se derivó de su intento de unificar el sentimentalismo con las bases propias del Realismo. El loco Dios, Mancha que limpia y El gran galeoto son sus obras cumbres.
Poesía
Es tal vez uno de los géneros del Realismo literario que avanzó de manera más lenta. El cambio hacia la nueva corriente tardó lo suficiente como para seguir viendo reflejados en los versos algunos rastros del Romanticismo.
Ramón de Campoamor y Gaspar Núñez de Arce fueron sus máximos representantes.
Ramón de Campoamor (1817-1901)
Dentro del Realismo literario español, sus obras se caracterizaron por ser prosaicas y carentes de elegancia, según sus críticos. Sin embargo, el lenguaje que empleó llegó a muchas personas, y eso le dio una gran popularidad. También escribió teatro.
Su poesía es extensa. Entre las más reconocidas se mencionan las siguientes: Una mujer generosa (teatro, 1838), Humoradas (1886-1888), Las doloras (1846), Colón (1853), El drama universal (1853), Los buenos y sabios (1881), Don Juan (1886) y Fábulas completas (1941).
Gaspar Núñez de Arce (1832-1903)
Poeta y político que pasó del Romanticismo al Realismo. En cada uno de sus trabajos intentó expresar sus ideas de forma sencilla, y sin palabras rebuscadas.
Las siguientes fueron sus obras más importantes: Gritos del combate (1875), Un idilio (1879), El vértigo (1879) y La pesca (1884). Con el primero quiso darles a los lectores poemas civiles y patrióticos.
Referencias
- Smetana, G. Realismo Literario Español: Características, historia y autores. Recuperado de espaciolibros.com
- Álamo, A. y Vallés, R. Realismo Español. Recuperado de lacturalia.com