Diego de Hojeda: biografía y obras
Diego de Hojeda (1571?-1615) fue un poeta y religioso de origen español, conocido por ser el autor La Cristiada, un poema heroico donde se narró la Pasión de Cristo. Gracias a esa única obra se le consideró como el poeta más relevante del estilo épico en el período colonial de Perú.
La Cristiada es considerada la obra más importante escrita sobre Jesús en Perú. Además, entre sus aportes se le reconoció como uno de los fundadores del Convento la Recoleta Dominicana de la Bendita, ubicado en Lima. Diego de Hojeda llegó a ocupar los cargos más importante entre los religiosos de la época.
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Pocos datos existen sobre los primeros años de la vida de Diego de Hojeda y Carvajal. Solo el historiador y fraile Juan Meléndez ha podido esclarecer algunos detalles de la vida del poeta y religioso. Estableció, por ejemplo, que 1571 fue el año de nacimiento de Diego, cuyo lugar de origen fue Sevilla.
Diego Pérez Núñez y Leonor de Carvajal fueron los padres del poeta. El apellido Hojeda no pertenece a ninguno de sus progenitores y la explicación que encontró Meléndez sobre esto radicó en que era una tradición de esa época bautizar al segundo hijo varón de una familia con el apellido del abuelo materno.
No se conocen los detalles sobre su formación académica, aunque algunos historiadores afirman que recibió educación humanística. Sin embargo, no hay documentos que respalden esto.
Con 17 años tuvo la oportunidad de viajar a Perú, haciendo escala primero en Panamá. Sus padres no estuvieron al tanto de la decisión de su hijo, motivado según los historiadores por la negativa de su familia a que se convirtiera en fraile. Desde ese entonces no regresó a España en ningún momento.
Llegó a Perú a finales de la década de los 80 del siglo XVI para formar parte de la Orden de Predicadores. Su primer paso fue ingresar al convento del Rosario. Desde su etapa como novicio logró alternar entre su pasión por la literatura y la teología. En el convento convivió con más de 130 frailes.
La Universidad de San Marcos se fundó en 1551 en el lugar donde se encontraba el convento del Rosario. Es por ello que se cree que Hojeda realizó sus estudios como teólogo y sobre literatura en esa institución, la primera de la que se tiene constancia en el Nuevo Mundo.
Sus cualidades como escritor y poeta tuvieron gran reconocimiento más allá del convento. Sus conocimientos de teología fueron aprovechados para que diera clases a comienzos del siglo XVII. De esta forma fue ganando poder y fama en Perú.
Alternó sus funciones como maestro y religioso. En 1609 fue trasladado a Cuzco para ocupar el cargo de superior y un año más tarde desempeñó el mismo rol en la capital del país.
Perdió todos sus cargos y poder en 1611 cuando llegó a Perú un visitador de la corona española, el fraile Alonso de Armería. Lo ordenaron que se trasladara al convento de Cuzco como castigo, lugar en el que permanece por poco tiempo ante de ser enviado a Huánuco.
Diego de Hojeda murió cuando solo tenía 44 años. Su fallecimiento ocurrió el 24 de octubre de 1615 en el sencillo convento en Huánuco de los Caballeros, Perú.
Luego de muerto, el visitador de Almería fue depuesto de su cargo por las múltiples quejas sobre sus decisiones. El fraile Nicolás González decidió entonces ordenar que los restos de Hojeda fueran desenterrados y realizó una ceremonia religiosa.
Los restos de Hojeda se trasladaron a la cripta del convento del Rosario, actualmente más conocido como Santo Domingo de Lima, el cual se fundó en 1535. En la cripta del convento eran enterrados los religiosos que formaron parte de la Orden en aquella época. Los restos de Santa Rosa de Lima también se encuentran enterrados ahí.
Los historiadores que han estudiado la vida y obra de Diego Hojeada aseguraron que llegó a escribir varios poemas con el paso de los años, pero lo cierto es que La Cristiada es la obra más importante de su carrera como escritor.
La Cristiada tuvo diferentes ediciones a lo largo del tiempo. En la Biblioteca Nacional de París se consiguió el manuscrito original. Las ediciones posteriores presentaron la obra del poeta, pero también presentaron análisis críticos sobre la obra.
El libro lo escribió con octavas reales, que son estrofas compuestas por ocho versos de 11 sílabas cada uno. Son casi dos mil estrofas las que conformaron todo el texto.
La primera edición apareció por primera vez en 1611, luego de ser impresa en España. Se aprobó su publicación dos años antes gracias a una decisión de los frailes Agustín de Vega y de Lorenzana.
Se le conocieron otros dos textos a Diego Hojeda como escritor. En 1590 escribió algunas líneas para la presentación de la obra del poeta chileno Pedro de Oña, titulada como Arauco Domado. El texto de Hojeda, presente en la introducción junto con el de otros autores, se basó en elogiar el trabajo del chileno, práctica habitual en esos tiempos.
También se conoció el análisis que hizo en 1602 sobre Primera parte de la miscelánea, en varios coloquios. Un trabajo que publicó Diego Dávalos Figueroa.
Utilizó un lenguaje sencillo en sus trabajos y algunas veces el recurso literario que usó fue el de la prosa. Se observaron características de diferentes estilos, especialmente del período barroco y del Renacimiento. Esto era algo habitual entre los escritores que formaron parte del Siglo de Oro de la literatura española.
No se preocupó mucho por la estética de su trabajo, ya que su objetivo fue apelar a los sentimientos de los lectores. Buscó generar un cambio y despertar interés por las ideas del evangelio.
Jesús fue un personaje que siempre estuvo presente en su poesía. También hizo referencia al cielo, a los ángeles, a Judas o a María, entre otros.
Tuvo una gran diversidad de modelos de narración. En el caso de La Cristiada se habló de una obra con un narrador que es flexible y cuyo objetivo va variando a lo largo del texto. Algunas veces con un tono que llegó a ser aleccionador.
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