Filippo Tommaso Marinetti: biografía, futurismo y obras
Filippo Tommaso Marinetti fue un poeta, escritor, dramaturgo, editor italiano nacido en diciembre de 1876. Su mayor aportación a la literatura fue su condición de fundador del movimiento futurista, considerada como la primera vanguardia italiana del siglo XIX. Parte de su obra sirvió como base ideológica para el fascismo de Mussolini.
Sus primeras obras se enmarcaron dentro de la literatura simbolista y utópica. A finales del siglo XIX, el autor comenzó a escribir poemas simbolistas con verso libre y pronto amplió sus creaciones con la publicación de varias obras de teatro, como Elettricità sessuale (1909).
Desde comienzos del siglo XX, Marinetti se dedicó exclusivamente a la literatura. En febrero de 1909 vio la luz uno de sus escritos más importantes, Manifiesto futurista, además de colaborar con la revista en francés Anthologie revue.
En 1919, publicó el Manifiesto fascista, considerado como una de las bases del fascismo italiano. El autor colaboró estrechamente con Mussolini y llegó a participar en el asedio de Stalingrado en 1942. La derrota en la Segunda Guerra Mundial provocó que el autor cayera en el olvido. Falleció en diciembre de 1944 a consecuencia de un paro cardiaco.
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Emilio Angelo Carlo Marinetti, aunque otros documentos lo nombran como Filippo Achille Emilio, nació el 22 de diciembre de 1876 en Alejandría (Egipto).
Su lugar de nacimiento se debió a que su padre, Enrico Marinetti, era un abogado italiano que había sido destinado al país norteafricano para trabajar en las oficinas comerciales de la Compañía del Canal de Suez.
El trabajo de su padre, muy bien pagado, permitió que la familia acumulase un importante patrimonio, lo que resultaría de gran ayuda para que Marinetti pudiera dedicarse a su futura actividad artística.
Existen pocos datos sobre los primeros años de vida de Marinetti, que solía añadir elementos mitificadores a sus escritos autobiográficos. Un aspecto que sí se conoce fue que, a partir de 1888, realizó sus estudios en el colegio San Francisco Javier de Alejandría, dirigido por jesuitas franceses.
A los 17 años, mientras aún estaba estudiando, Marinetti fundó su primera revista escolástica bajo el seudónimo de Héspero, Papyrus. En 1893, su intento de introducir en la escuela las novelas románticas de Émile Zola le costó ser expulsado por los jesuitas, que las consideraban escandalosas. El joven Filippo tuvo que terminar el bachillerato en París, en 1894.
Marinetti volvió con el resto de su familia, que se había trasladado a Milán, e inició una nueva etapa educativa en la Universidad de Milán, junto con su hermano mayor Leone. En esta institución comenzó a estudiar derecho, carrera que después continuó en la Universidad de Pavía.
El joven autor se graduó finalmente en la Universidad de Génova, el 17 de julio de 1899, con una tesis titulada La corona en el sistema parlamentario.
Unos años antes, en 1895, Marinetti había sufrido el primer gran trauma de su vida: la muerte de su hermano. Esto, según los biógrafos, pudo influir en que nunca llegara a ejercer como abogado y se dedicara por completo a la literatura.
Después de graduarse, Marinetti solo se dedicó a escribir. Durante esos primeros años, sus obras abarcaron todos los géneros literarios, desde la poesía hasta el teatro, pasando por la narrativa.
En 1902, la muerte de su madre, quien lo había animado desde niño para que escribiera poesía, representó otro duro golpe para el autor.
Antes de terminar sus estudios en la Universidad de Génova, Marinetti había empezado a colaborar con la revista Anthologie revue. En ella, a finales del siglo XIX y principios del siglo XX, empezó a publicar sus primeros poemas.
El autor publicó en los años siguientes varios libros de poesía, siempre en francés. En ellos utilizaba el verso libre y su contenido mostraba una gran influencia de Stéphane Mallarmé y, especialmente, Gabriele D’Annunzio. Sus poemas, además, tenían un marcado estilo simbolista.
También en francés, Marinetti publicó su obra teatral Le roi Bombance, además de uno de sus poemas más conocidos, Les vieux marins, que ganó el concurso Samedis populaires.
En 1905, Marinetti y el autor Sem Benelli fundaron la revista Poesía, en Milán. En 1909, en otra obra de teatro, Elettricita sessuale, introdujo la figura de los robots, aunque con otro nombre, ya que el término no sería utilizado hasta su creación diez años después por parte del novelista checo Karel Čapek.
Además de servir como vehículo para sus obras, la revista Poesía ayudó a que las obras de algunos autores simbolistas desconocidos llegaran a Italia.
Marinetti era un gran aficionado a los automóviles y la velocidad. En 1908, eso casi le cuesta la vida: tuvo un accidente en las afueras de Milán al tratar de evitar a dos ciclistas.
Este acontecimiento fue decisivo para que redactara el Manifiesto Futurista. Cuando salió del coche, Marinetti afirmó que se sentía un hombre nuevo y se dispuso a, según afirmó, deshacerse del decadentismo y del estilo de poesía que hasta entonces había cultivado.
El autor dejó entonces escritas las siguientes palabras dirigidas a sus compañeros de profesión: “Queremos destruir y quemar los museos, las bibliotecas, las academias variadas y combatir el moralismo, el feminismo y todas las demás cobardías oportunistas y utilitarias” o “Cantaremos a las grandes multitudes que el trabajo agita, por el placer o por la revuelta”.
El manifiesto fue enviado por Marinetti a los principales periódicos italianos, en 1909. El primero en publicarlo fue la Gazzetta dell Emilia de Bolonia, el 5 de febrero. El siguiente fue Le Figaro, una de las publicaciones más importantes de Francia.
A partir de ese momento, Marinetti desarrolló la literatura futurista en sus poemas y ensayos. Su novela Mafarka il futurista, de 1910, le costó una demanda judicial por atentar a la moral, aunque ganó el juicio.
Poco a poco, Marinetti reunió a su alrededor a un grupo de artistas, como los pintores Umberto Boccioni, Luigi Russolo y Carlo Carrá, y el poeta Aldo Palazzeschi. Con ellos, creó las “noches futuristas”, unas representaciones teatrales en las que los artistas futuristas proclamaban sus ideas.
La etapa dorada del movimiento futurista duró hasta la década de 1920. Con su declive, Marinetti empezó a mostrar simpatías por el fascismo.
Marinetti se convirtió en un ardiente defensor de las acciones militares. Su apoyo decidido a la dictadura de Mussolini le valió para ocupar varios importantes cargos oficiales y a formar parte de la Academia de Italia, una organización fundada por los fascistas.
En 1842, formó parte de un regimiento italiano enviado a combatir a la Unión Soviética y resultó herido en Stalingrado.
Durante esos años, Marinetti publicó obras como Democrazia futurista (1919), Futurismo e Fascismo, Prigionieri e Vulcano (1927) y Poemi simultanei futuristi (1933).
El autor se convirtió en el poeta oficial del régimen, al que permaneció fiel hasta su caída y el establecimiento de la República de Saló.
Olvidado y con su prestigio perdido, Filippo Tommaso Marinetti falleció víctima de un ataque cardiaco el 2 de diciembre de 1944, en Bellagio.
El principal aporte de Marinetti a la literatura fue la fundación del movimiento futurista. El manifiesto con el que presentó esta corriente se publicó en 1909. Años después, en 1915, el autor siguió desarrollándolo cuando declaró que la Primera Guerra Mundial era el poema futurista más bello nunca escrito.
Además del primer Manifiesto Futurista, Marinetti publicó dos más. El segundo vio la luz en Le Figaro, en 1910, mientras que el tercero fue escrito en 1912.
Estos manifiestos describen una civilización dirigida por la velocidad y las máquinas. Marinetti defiende en estos escritos el uso de la violencia y afirma que la guerra está justificada. Para él, ambos elementos forman parte de la afirmación individual.
En el aspecto formal, Marinetti creó una nueva expresividad que rompía con las sintaxis. En sus escritos no utilizaba ni adjetivos ni signos de puntuación con el fin de atrapar la atención de los lectores y expresar su visión de la vida moderna.
Marinetti cultivo todo tipo de géneros literarios. La gran mayoría de sus obras eran poemas y ensayos, pero también destacó como autor teatral y de novela. Entre estas últimas destacó Mafarka il futurista, mientras que entre las primeras se encuentra Elettricità sessuale.
Otra de sus obras más características fue La battaglia di Tripoli (1911), compuesta por los que han sido descritos como reportajes poéticos.
Entre sus obras teatrales se encuentran Zang Tumb Tumb (1914), de carácter experimental. En ella describe de manera muy cruenta como se desarrolló la batalla de Adrianópolis, que él mismo cubrió como corresponsal.
– Las 5 estrellas.
– Los viejos marinos.
– La conquete des étoiles.
– Destruction.
– Poemi simultanei futuristi.
– Elettricità sessuale.
– Le roi Bombance.
– Mafarka il futurista.
– La battaglia di Tripoli.
– Parole in libertá.
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