Ansiedad

Nomofobia: síntomas, causas, consecuencias, tratamiento


La nomofobia es una patología de reciente aparición que se refiere a un miedo irracional e intenso a estar alejado del teléfono móvil o incomunicado de alguna manera. Se trata de una condición psicológica cada vez más común en los países occidentales, especialmente entre la población más joven.

El término “nomofobia” surge como una abreviación de la frase inglesa “no mobile phone fobia”, y fue utilizado por primera vez en el año 2010 en un estudio realizado por la oficina de correos de Reino Unido. En este estudio, se comprobó que aproximadamente el 53% de los usuarios de teléfonos móviles sufrían algún grado de ansiedad cuando no podían utilizarlo por algún motivo.

Numerosos estudios llevados a cabo más tarde parecen confirmar que la nomofobia se ha convertido en un problema muy habitual entre la población. Por ejemplo, hoy en día sabemos que casi dos de cada tres personas duermen con su teléfono al lado de la cama; y los tiempos de uso de los smartphones no dejan de aumentar año tras año.

Los síntomas de la nomofobia son muy parecidos a los de otros trastornos de ansiedad, incluyendo niveles muy altos de estrés, malestar generalizado, pensamientos obsesivos, dificultad para dormir e incluso ataques de pánico. En este artículo estudiaremos en qué consiste esta patología en detalle.

Índice del artículo

Síntomas de la nomofobia

La nomofobia se da en situaciones en las que una persona sufre algún tipo de ansiedad debido a que no tiene acceso a su teléfono móvil. Esto provoca una serie de problemas relacionados que implican una relación tóxica con la tecnología, incluyendo algunos como el “síndrome de la sobreconexión”, por el cual cada vez tenemos más contacto directo con otras personas al sustituirlo por el digital.

Los síntomas más comunes de la nomofobia pueden aparecer en una situación concreta debido a causas muy diversas. Entre las más comunes se encuentran la pérdida del teléfono móvil, la falta de batería, la dificultad para conseguir señal o el haberse olvidado el teléfono en casa. La persona que presenta la fobia hará todo lo que pueda para evitar que se presente cualquiera de estas situaciones.

En general, los síntomas se suelen clasificar en función de si son cognitivos, emocionales o de comportamiento. A continuación veremos algunos de los más comunes.

Síntomas comportamentales

Los síntomas de comportamiento son los más fáciles de detectar en la mayoría de casos de nomofobia. Para evitar el malestar psicológico que les provoca la falta de acceso a su teléfono, estos individuos suelen llevar a cabo una serie de cambios que pueden interferir en gran medida con el desarrollo normal de su vida.

Así, por ejemplo, algunas personas afectadas por la nomofobia llevan siempre encima un cargador para evitar quedarse con batería, o incluso utilizan dos móviles para no perder nunca la conexión. Por otro lado, mantienen activo su dispositivo todo el tiempo, y nunca se alejan demasiado de él para no perderse ninguna notificación o mensaje.

En algunos casos, se ha comprobado que la persona utiliza su teléfono móvil como una especie de protección contra situaciones que le causan malestar, mirándolo todo el rato para tener que enfrentarse a sus miedos o preocupaciones.

La conducta relacionada con el teléfono tiende a ser además muy compulsiva, comprobando continuamente los individuos las mismas aplicaciones a pesar de no tener notificaciones nuevas.

Síntomas emocionales

El ámbito al que más afecta en un principio la nomofobia es el emocional. Las personas afectadas por esta patología desarrollan síntomas muy similares a los de otros trastornos de ansiedad, que pueden llegar a intensificarse en gran medida si no se elimina el problema a tiempo.

Así, por ejemplo, los individuos que padecen nomofobia suelen desarrollar un nivel muy alto de estrés, que aparece principalmente en los momentos en los que por cualquier motivo no les es posible acceder a su teléfono móvil. En casos muy extremos, este estrés podría acabar desembocando en ataques de pánico, con todas las consecuencias que eso conlleva para la vida de la persona.

Otro de los síntomas más comunes de la adicción a los teléfonos móviles es el aplanamiento emocional. Debido a que los smartphones son muy estimulantes, las personas con nomofobia tienen dificultades para interesarse por otros elementos de su vida que normalmente les provocarían sentimientos intensos, desde sus relaciones sociales hasta su trabajo o estudios.

Por último, es muy común que las personas con adicción a su teléfono móvil acaben desarrollando alguna forma de depresión o estado de ánimo permanentemente alterado. La gravedad de este síntoma puede variar mucho en función de la personalidad del paciente y de la intensidad de la patología.

Síntomas cognitivos

A nivel cognitivo, los síntomas de la nomofobia tienen que ver principalmente con la obsesión por estar conectado al móvil en todo momento. Muchas de las personas afectadas no pueden quitarse de la cabeza su necesidad de comprobar el teléfono constantemente, de una manera que recuerda en gran medida al trastorno obsesivo – compulsivo.

De hecho, en muchos casos los individuos con nomofobia llegan a desarrollar lo que se conoce como “notificaciones fantasma”: la sensación de haber recibido una nueva notificación cuando en realidad no se ha producido ninguna. Esto es un efecto puramente psicológico, que se agrava cuanto más intensa se hace la patología.

Generalmente, además, la nomofobia va acompañada de multitud de creencias irracionales que pueden agravar el resto de problemas. Algunas de las más comunes son la idea de que se va a sufrir rechazo social si no se está constantemente conectado, o la de que es imposible encontrarse bien si no se tiene el móvil encima continuamente.

Causas

Aunque no se conocen las causas exactas de la nomofobia, sí que existen algunas teorías que parecen explicar por qué esta patología está cada vez más extendida entre la población.

Causas neurobiológicas

La más aceptada es la que describe el problema como causado por una adicción, que funciona del mismo modo que las relacionadas con drogas o con las apuestas.

Se ha demostrado que el funcionamiento de los smartphones afecta al circuito cerebral de recompensa. Cuando recibimos una notificación, nuestro cerebro libera una pequeña cantidad de endorfinas, que son las sustancias que nos hacen sentir placer y bienestar. El problema es que estas sustancias son también muy adictivas.

Así, con el tiempo empezamos a asociar las notificaciones y el estar conectados constantemente con un gran placer; y el resto de actividades y estímulos pierden gran parte de su carga positiva.

Esto es algo similar a lo que ocurre con la nicotina, que proporciona placer en el momento de ingerirla y crea malestar cuando los niveles corporales de la misma bajan.

Causas sociales

Por otro lado, muchos expertos también defienden la idea de que al estar nuestra sociedad cada vez más conectada, existe de igual manera un componente social y cognitivo en la aparición de la nomofobia.

Lo más probable es que ambas explicaciones sean ciertas en gran medida, en lugar de existir una causa única para todos los casos.

Consecuencias

Como ya hemos visto, los síntomas de la nomofobia pueden llegar a ser muy dañinos para la persona. Si no se trata este problema a tiempo, todas las áreas de la vida del individuo acaban viéndose afectadas en mayor o menor medida, lo que generalmente agrava aún más el problema en un círculo vicioso del que es muy complicado salir.

Una de las áreas que se ven más afectadas por la adicción a los teléfonos móviles es la social. Las personas con nomofobia suelen estar más pendientes de sus notificaciones que de la gente con la que interactúan en la vida real, lo que conlleva que sus relaciones se acaben deteriorando con el tiempo en la mayoría de los casos.

A nivel laboral, los efectos suelen ser muy parecidos. Al estar tan pendientes de su teléfono móvil, su productividad tiende a descender en gran medida, lo que puede suponerles problemas como despidos o tensiones en el lugar de trabajo.

Además de esto, psicológicamente la nomofobia puede acabar desembocando en patologías más graves, como depresión, trastorno de ansiedad o trastorno obsesivo – compulsivo. Por eso, cada vez se están realizando más investigaciones tanto para tratar el problema a tiempo como para prevenirlo y evitar su aparición.

Tratamiento

A nivel de tratamiento, la nomofobia suele enfocarse como cualquier otra adicción. Por una parte, la persona tiene que realizar cambios conductuales, en este caso reduciendo en gran medida el tiempo que pasan junto al móvil y las conductas compulsivas relacionadas con este.

Generalmente, la terapia más utilizada para tratar este problema es la cognitivo – conductual. Durante las sesiones la persona se va enfrentando poco a poco a las situaciones que le asustan, a la vez que intenta cambiar sus creencias respecto al uso del móvil y forma nuevos hábitos más saludables.

Muchas personas, sin embargo, deciden no acudir a terapia y tratan de solucionar la nomofobia por sí mismas. Algunas de las técnicas más habituales implican el uso de temporizadores, dejar el móvil en casa, o directamente eliminar todas las cuentas en redes sociales y las aplicaciones que más utilizan.

Prevención

A pesar de que existen varios tratamientos efectivos para la nomofobia, suele ser mucho más útil prevenir la aparición del problema. En este sentido, es fundamental llevar a cabo una buena campaña de concienciación sobre los riesgos del abuso de las nuevas tecnologías, especialmente entre los más jóvenes.

Por otra parte, crear hábitos saludables y participar en aficiones que no estén relacionadas con las nuevas tecnologías son dos maneras muy efectivas de reducir la probabilidad de aparición de la nomofobia.

Referencias

  1. “¿En qué consiste la nomofobia?” en: Sanitas. Recuperado en: 23 Enero 2020 de Sanitas: sanitas.es.
  2. “Nomophobia: A Rising Trend in Students” en: Psychology Today. Recuperado en: 23 Enero 2020 de Psychology Today: psychologytoday.com.
  3. “Afraid of Losing Your Phone? There’s a Name for That: Nomophobia” en: Healthline. Recuperado en: 23 Enero 2020 de Healthline: healthline.com.
  4. “Nomophobia: The Modern-Day Pathology” en: Psychiatry Advisor. Recuperado en: 23 Enero 2020 de Psychiatry Advisor: psychiatryadvisor.com.
  5. “Nomophobia” en: Wikipedia. Recuperado en: 23 Enero 2020 de Wikipedia: en.wikipedia.org.