Jorge VI del Reino Unido: biografía, trono, reconocimientos
Jorge VI del Reino Unido (1895-1952) fue el cuarto rey de Inglaterra perteneciente a la Casa de Windsor. Llegó al trono a finales de 1936, luego de que su hermano Eduardo VIII renunciara a sus obligaciones reales para casarse con una mujer que se había divorciado en dos ocasiones.
Fue muy conocido por tener un problema de habla que le hacía tartamudear. Aunque gozó de gran estima del pueblo inglés ya que se mantuvo en Londres durante la Segunda Guerra Mundial haciendo frente a los bombardeos de las tropas del ejército alemán.
![Fuente: United Nations Information Office, no. 7946. Transfer; United States. Office of War Information. Overseas Picture Division. Washington Division; 1944. [Public domain], vía Wikimedia Commons.](/academia/assets/jpg/21BD5CD673D77841402962CD7DFE50D3.jpg)
La Corona sufrió grandes cambios a lo largo de su reinado, en especial porque muchas colonias inglesas empezaron a reclamar su independencia. Es por ello que bajo su reinado se creó la Mancomunidad de Naciones (Commonwealth en inglés), con el fin de reconocer los derechos de las naciones vinculadas al Reino Unido aunque sin obligación de sumisión.
Igualmente, los integrantes de esta Mancomunidad siempre han respetado la figura de los reyes.
Duró 16 años como rey de Inglaterra, cargo que ocupó hasta el día de su muerte. Además, fue el padre de la actual reina de Inglaterra, Isabel II, quien ocupa el trono desde hace casi 70 años.
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El nombre completo de Jorge VI al ser bautizado fue Alberto Frederick Arthur George. Nació el 14 de diciembre de 1895 en la casa de campo de la familia real que se ubica en Norfolk y que de forma popular se conoce como la casa Sandringham. Su nacimiento ocurrió mientras su bisabuela Victoria era la reina de Inglaterra.
Jorge VI nació gracias a la unión entre Jorge V y María de Teck. Su padre subió al trono en 1910 cuando Jorge VI apenas tenía 15 años.
El futuro rey fue bautizado como Alberto en honor a su bisabuelo, el esposo de la reina Victoria, Alberto de Sajonia quien había fallecido en 1861. De forma cariñosa fue conocido por todos los miembros de la familia real como Bertie. Al nacer recibió su primer título real que fue príncipe Alberto de York.
Una de las características más obvias del rey Jorge Vi era que desde muy joven sufrió tartamudez. Esto provocó que recibiera una gran cantidad de apodos, burlas y que muchas veces se dudara de su capacidad para llevar las riendas de la Corona.
Además era zurdo, pero fue forzado a escribir usando solamente su mano derecha.
Los historiadores han hecho hincapié en que de niño era muy propenso a sufrir diferentes enfermedades. Esto también fue notorio a nivel físico, ya que sufrió de una deformidad conocida como Genu valgo que consistía en una desviación de las piernas que provoca que las rodillas queden juntas.
La educación de Jorge VI se enfocó en lo militar y con 14 años entró al Colegio Naval en Osborne. Empezó su formación como cadete. No fue un alumno particularmente destacado, incluso quedó de último en su clase, pero igual logró ingresar a Dartmouth, la escuela Naval del Reino Unido.
Con 18 años ya era parte de la marina real británica y algunos meses más tarde participó en la Primera Guerra Mundial. Estuvo a bordo del buque HMS Collingwood durante la batalla de Jutlandia de la que los británicos salieron ganadores.
Con el paso de los años recibió varios cargos y roles dentro de las fuerzas armadas británicas. Primero estuvo encargado en Cranwell de la institución en la que se formaban los nuevos integrantes al Servicio Aéreo Naval.
Más adelante se creó en el Reino Unido la Real Fuerza Aérea, donde Jorge VI fue enviado y nombrado oficial comandante. Permaneció en esta rama de las Fuerzas Armadas hasta agosto de 1918.
Llegó a formar parte de la Fuerza Aérea Independiente en la ciudad francesa de Nancy. Con la finalización de la Primera Guerra Mundial, Jorge VI fue designado en cargos administrativos en las Fuerzas Aéreas.
Para 1919 ingresó al Trinity College, que forma parte de la Universidad de Cambridge. Allí se dedicó a estudiar historia y economía, pero solo estuvo durante un año.
En 1920 Alberto recibió el título nobiliario de duque de York, que es un título que siempre recibe el segundo hijo del rey o reina de ese momento. Además fue nombrado también conde de Inverness y barón de Killarney.
Desde ese momento empezó a asistir a múltiples eventos en nombre de su padre. Era muy normal verlo de visita minas o fábricas de la época, por lo que llegó a ser conocido como el príncipe industrial.
También en 1920 el entonces príncipe conoció a Isabel Bowes-Lyon. Era la hija de una conocida familia aristócrata del Reino Unido, cuyos padres eran los condes de Strathmore.
Para esa época, la costumbre era que los miembros de la realeza solo podían contraer matrimonio con otros integrantes de familias reales.
A pesar de todo se casaron en 1923, pero el príncipe tuvo que hacer la propuesta de matrimonio hasta tres veces a su futura esposa quien tenía algunas dudas sobre formar parte de la familia real y los sacrificios que eso exigía.
El matrimonio ocurrió en la Abadía de Westminster. Fue una de las bodas más recordadas por haber sido una de las primeras muestras de modernidad de la Corona al aceptar a una plebeya.
La pareja solo llegó a tener dos hijas: Isabel (la reina actual) y Margarita.
La coronación de Alberto como rey de Inglaterra estuvo llena de controversias ya que no estaba en los planes que él fuera el sucesor de su padre. Eduardo VIII era el designado para ocupar el trono tras la muerte de Jorge V.
Eduardo VIII fue designado como rey el 20 de enero de 1936, fecha en la que murió Jorge V, pero no duró ni siquiera un año en el trono. Incluso nunca se llevó a cabo su coronación.
Todo se debió a que Eduardo anunció que quería contraer matrimonio con Wallis Simpson, una mujer estadounidense, plebeya y que ya había tenido dos divorcios. Todas características prohibidas por la monarquía iglesia. Para casarse, Eduardo tenía que renunciar a la Corona y a cualquier título real.
Finalmente renunció al trono el 11 de diciembre de 1936 para cumplir su deseo personal. Eso mismo día, Alberto fue designado como nuevo rey de Inglaterra. Escogió el nombre Jorge VI con el objetivo de demostrar que seguiría la misma línea del reinado de su padre.
Fue un ascenso muy complicado por todos los conflictos familiares que rodearon la designación y porque unos años más tarde empezó la Segunda Guerra Mundial. Sin duda, la primera prueba de fuego para que demostrase su liderazgo.
La coronación de Jorge ocurrió en mayo del año siguiente, en la misma fecha que se había pautado para coronar a su hermano. La reina María estuvo presente para ser testigo de la coronación de su hijo.
Jorge VI tuvo problemas desde temprana edad para pronunciar la letra K. Se quedaba sin habla con las palabras que tenían esa letra y eso originó una tartamudez que lo siguió por muchos años. Era un problema más que curioso que el rey no pudiera pronunciar palabras tan importantes para la realeza como rey o duque (‘king’ y ‘duke’ en inglés).
Este contratiempo se hizo aún más notorio por la naciente presencia de los medios de comunicación en todo el mundo. Se esperaba que el rey se dirigiera a la población por la radio y que sus visitas o compromisos reales fueran grabados por las cámaras de la época.
La tartamudez provocó la burla especialmente de los alemanes, quienes se referían a Jorge VI como el “rey tartamudo”.
Fue muy importante para el rey Jorge VI trabajar con Lionel George Logue, un logopeda de origen australiano que le ayudó a superar su tartamudez. Era muy habitual ver a Logue en todos los actos importantes a los que asistía el rey, entre ellos su coronación.
Logue llegó a inmortalizar en sus notas características del rey. Dijo de Jorge VI que era una persona de gran nerviosismo. La fórmula que utilizó para tratar al rey fue a través de enfoques que tenían que ver más con aspectos psicológicos.
La historia de cómo Jorge VI enfrentó su tartamudez y lo que significó para el pueblo inglés durante la Segunda Guerra Mundial fue sido difundida a lo largo de la historia. La película El discurso del rey (2010) centra su argumento en este tema.
Al final, este problema de Jorge VI se terminó convirtiendo en un símbolo. La manera en que lo afrontó le permitió ganar aún más apoyo del pueblo inglés y respeto.
Todos los problemas que se originaron por la Segunda Guerra Mundial, que terminó en 1945, afectaron bastante la salud de Jorge VI. Sufrió un cáncer de pulmón, un bloqueo en una arteria en su pierna derecha y una neumonía. Incluso se le removió el pulmón izquierdo.
Durante todos estos años de enfermedad, la princesa Isabel tuvo que asumir muchas de las responsabilidades de su padre como rey.
Finalmente Jorge VI murió en la casa Sandringham, el mismo sitio donde nació, por una trombosis coronaria el 6 de febrero de 1952. Solo tenía 56 años.
Falleció mientras dormía. Fue encontrado en la mañana y cerca del mediodía se dio a conocer la información al pueblo inglés. Ese mismo día asumió la Corona su hija Isabel con solo 25 años.
Miles de personas fueron testigos de todos los actos del entierro gracias a la presencia de la televisión. Otras miles salieron a las calles para rendir homenaje al rey.
Tras su muerte, Jorge VI recibió la Cruz de la Orden de la Liberación por parte del gobierno de Francia. Era una distinción que se le otorgó a personas que ayudaron a la victoria militar de Francia durante la Segunda Guerra Mundial.
Muchas instituciones en el Reino Unido fueron nombradas en su honor (hospitales, autopistas, estadios, etc.)
Hay estatuas de Jorge VI en varios lugares emblemáticos. Una de ellas se encuentra en el centro de Londres y hay otra en Hong Kong.
- Beal, Erica. King Emperor. Collins, 1941.
- Bradford, Sarah. King George VI. Weidenfeld And Nicolson, 1989.
- Donaldson, Frances Lonsdale et al. King George VI. And Queen Elizabeth. Lippincott, 1977.
- Judd, Denis. George VI. Tauris, 2012.
- Pudney, John. His Majesty, King George VI. Hutchinson, 1952.