Filosofía

Arjé: qué es y características


El arjé o arché es un concepto filosófico originado en la antigua Grecia. Su significado está vinculado con el inicio del universo o el génesis de todas las cosas. El término proviene de la lengua griega y significa origen o principio.

Según Aristóteles, era todo aquello autosuficiente, que no necesita otra cosa para existir dado que se vale de sí mismo.

El filósofo griego lo describía como el elemento primigenio o fundamental de algo, que no obstante su naturaleza intangible e indemostrable, ofrecía las condiciones de existencia de esa cosa.

Para el también filósofo griego y matemático Tales de Mileto, el arjé era el agua. Se considera que esta fue la primera explicación relevante del mundo físico.

Historia del concepto

Tales de Mileto concebía el arjé o arché como el ápeiron, es decir aquello que no tiene límites y es indeterminado. Uno de sus discípulos, Anaxímenes, consideraba que el aire o la niebla eran arjé.

Por otra parte, Pitágoras, otro filósofo y matemático griego, relacionó el concepto con las matemáticas al vincularlo con los números.

Para la escuela pitagórica los números no eran abstracciones (como se considera actualmente) sino elementos reales.

Incluso los consideraban la más real de las cosas en el mundo. Por ello creían que el arjé era el principio constitutivo de todas las cosas.

En cambio, posteriormente Heráclito lo vinculó de nuevo con los elementos naturales, pero en lugar del aire o el agua, propuso que el arché era el fuego debido a su naturaleza dinámica.

Pero creía que el principio originario era la palabra (logos), la cual solo podía compararse con el fuego.

Para este filósofo griego el fuego era similar al logos, puesto que el fuego “con mesura se enciende y con mesura se apaga”.

El monismo, otra corriente filosófica, cree en la existencia de un solo tipo de arché, mientras que el pluralismo, entre cuyos representantes está el filósofo Empédocles, establecía que no había una sola causa o sustancia primaria, sino varias.

Empédocles consideraba la realidad como algo cíclico. Al igual que este, el filósofo Anaxágoras sostiene que el universo está compuesto por aire, agua, fuego, tierra y muchos más elementos.

Además de admitir la pluralidad y el cambio permanente en la naturaleza, este pensador afirma que en la naturaleza todo es el resultado de la combinación de diversos elementos o principios, a los que llamó semillas.

El arjé y el átomo

Fueron los filósofos Leucipo de Mileto y su discípulo Demócrito los primeros en vincular el concepto de arjé con el del átomo.

Ellos creían en la existencia de los átomos como partículas de diversa naturaleza que no podían crearse ni destruirse. Estas partículas se agrupaban y conformaban la materia.

Demócrito, quien fue contemporáneo de Sócrates, pensaba que aunque todo cambia debía existir un elemento estable en el universo, por lo cual propone el arjé.

Según Demócrito, el arjé no tenía propiedades como cualquier otro elemento (sabor, color, etc), pero sí tres dimensiones: largo alto y profundidad. Es a este elemento justamente al cual llama átomo: algo indivisible, que no tiene partes.

Referencias

  1. Arche. Consultado el 15 de diciembre de 2017 de merriam-webster.com
  2. Arjé. Consultado de atlasdefilosofia.wikispaces.com
  3. El arjé o arché de Demócrito son los átomos. Consultado de prezi.com
  4. Arché. Consultado de es.wikipedia.org
  5. Atomismo – Filosofía Griega. Consultado de e-torredebabel.com
  6. Los presocráticos y el arjé o principio fundamental. Consultado de lospresocraticosyelarje.blogspot.com