Psicología educativa

10 actividades para niños con síndrome de Down


¿Qué son las actividades para niños con síndrome de Down?

Las actividades para niños con síndrome de Down están relacionadas con el juego, que pueden ayudar a mejorar las habilidades de estos pequeños. Existen muchos ejercicios de los que pueden beneficiarse y les ayudarán a desarrollar habilidades necesarias para su vida.

No solo es recomendable que refuercen aquellas habilidades que tienen totalmente adquiridas, sino también que trabajen en otras en las que presenten problemas, con el fin de mejorarlas para llegar a alcanzar su potencial individual.

Actividades para mejorar la atención

1. Cuéntame un cuento

Procedimiento: Una de las actividades que puedes realizar si quieres mejorar la atención de los niños es contarles un cuento y a continuación hacerles preguntas sobre sus protagonistas y lo que ha ocurrido.

Para ello, tienes que elegir un cuento que les guste y les produzca curiosidad. Normalmente, las fábulas suelen ser más divertidas y pueden, además, aprender de sus moralejas.

Una vez que has terminado de contar el cuento o la fábula, debes hacer preguntas a los niños para corroborar que se han enterado y que han comprendido la historia. Por ello, preguntas tales como: ¿Quién es el protagonista?, ¿Cómo se llama?, ¿Qué le ha ocurrido?, ayudarán a saber el grado de comprensión.

Material: Cuentos y fábulas. 

Consejos: Mientras estás contando el cuento tienes que asumir los roles de los personajes e ir cambiando la voz, con el fin de hacer más entretenida la actividad y despertar la curiosidad en los niños. Dependiendo del nivel académico y de comprensión que tengan los niños, se irán además intercalando preguntas relevantes.

2. ¡Somos músicos!

Procedimiento: La música puede ayudar a los niños con síndrome de Down a desarrollar y mejorar su atención. Una de las formas más divertidas de trabajarla es escuchando canciones. Mientras la escuchan, los niños tienen que hacer diferentes ejercicios, como por ejemplo, dar palmas siguiendo el ritmo, saltar, mover las manos hacia arriba, etc.

Lo ideal es poner diferentes estilos de música donde los ritmos sean diferentes para irlos intercalando. Este tipo de ejercicio también se puede realizar con instrumentos de percusión, como el triángulo o el tambor. La idea sería la misma, que al ritmo de la música los toquen.

La distribución más recomendable para realizar esta actividad, es que los niños se coloquen en círculo, ya que así podrán moverse y seguir el ritmo de la música más cómodamente. Si alguno de ellos falla, quedará eliminado y ayudará a sus compañeros a realizar la actividad.

Material: Instrumentos musicales, en el caso de que se prefiera realizar la actividad de este modo.

Consejos: Para que la actividad sea más dinámica, es aconsejable que se intercalen los diferentes tipos de canciones, comenzando por las que presentan un ritmo lento y terminando con aquellas que son más movidas. De esta forma, se irá aumentando el nivel de dificultad.

Actividades para mejorar la psicomotricidad fina y gruesa

3. ¿Cuál es su forma?

Procedimiento: esta actividad suele ser muy sencilla y ayuda a que los niños cojan los materiales adecuadamente y tengan que hacer fuerza con este, justo lo que estamos buscando.

Con un punzón, tienen que puntear el contorno de diferentes fichas de dibujos que previamente hemos preparado, da igual el tipo de dibujos que sean. Los que vienen en los cuadernillos de colorear son perfectos.

La idea es que sigan la línea del contorno del dibujo sin salirse y puntearlo según les vayas diciendo (dejando más distancia o menos entre punto y punto). Una vez que todos han punteado el contorno, tienen que decirnos qué forma tienen los objetos que aparecen, si son animales o personas, y qué ropa llevan puesta.

Materiales: Para realizar esta actividad, será necesario utilizar punzones, corcho y los dibujos que tienen que puntear.

Distribución: Es recomendable que para tener la clase controlada en esta actividad, coloques a los niños en una mesa grande, de forma que puedas ir supervisando sus movimientos.

Consejos: Si es la primera vez que cogen un punzón, tendremos que explicarles cómo cogerse y utilizarse para que no se hagan daño con la punta. Por otro lado, también tendremos que mostrárselo, ya que en la mayoría de ocasiones explicarles el funcionamiento no es suficiente.

Al principio de la actividad, van a correr muchísimo punteando sin tener un orden de trabajo, por lo que es indispensable que le mostremos que tienen que ir poco a poco y comenzar por alguna parte del dibujo.

4. Cortamos filas para hacer bolitas

Procedimiento: Otra de las actividades que podemos realizar para mejorar la psicomotricidad de nuestros alumnos es cortar papeles de periódico de forma horizontal siguiendo unas líneas que previamente hemos pintado en ellos.

Esto les permitirá aprender cómo se cogen las tijeras y para qué se utilizan. Además, también podrán seguir las líneas que previamente les hemos marcado con un rotulador mejorando su atención y la coordinación.

Una vez que han recortado todos los papeles de periódico, tienen que ir tira por tira haciendo bolas de diferente tamaño. Esto les permitirá incorporar nuevos movimientos a sus dedos y muñecas, así como desarrollar su motricidad fina correctamente.

Posteriormente, estas bolitas de papel se pueden utilizar para decorar dibujos y así realizar otra actividad para trabajar la psicomotricidad fina.

Materiales: Papel de periódico, tijeras, rotulador y pegamento.

Consejos: Al igual que en el manejo del punzón, tenemos que explicarles la correcta utilización de las tijeras para que no se hagan daño. La buena distribución del espacio nos permitirá controlar los movimientos en todo momento.

5. ¿Cuántos objetos hay en la bolsa?

Procedimiento: Se dividirán a los niños en varios grupos. A continuación, se les repartirán bolsas con objetos de diferentes tamaños que tienen que ir sacando y colocando en una mesa mientras los van contando.

El grupo que termine antes de contar y sacar los objetos será el ganador, por lo que sus miembros podrán elegir uno de esos juguetes u objetos para jugar con él en el recreo.

Materiales: Los materiales necesarios para esta actividad pueden ser objetos de clase o juguetes. Lo importante es que sean de diferentes tamaños, con el fin de trabajar la motricidad.

Consejos: Para vigilar el tiempo y que exista igualdad de condiciones, el profesorado deberá de acompañar esta actividad con canciones. Por otro lado, también sería recomendable dividir a los niños en grupos mixtos y con diferentes niveles cognitivos, para que puedan ayudarse los unos a los otros durante la actividad.

6. Pasa la pelota por el aro

Procedimiento: Otra de las actividades para trabajar la psicomotricidad gruesa es la de “pasa la pelota por el aro”. Los niños se tienen que colocar en dos filas y uno a uno tienen que ir cogiendo una de las pelotas que a priori se han colocado en la pared, e ir encestándolas por su correspondiente aro (las pelotas van a tener el mismo color que el aro por el que hay que pasarlas).

De esta forma, también estamos trabajando de forma transversal los colores y la actividad se hace más divertida.

Materiales: Aros y pelotas de diferente tamaño y color.

Consejos: Tienes que ir cambiando de sitio las pelotas y los aros, asegurándote de que la posición que puedan tener no dé pistas sobre qué pelota es la pareja de cada aro. Lo único a través de lo que se puede saber es por su color.

Actividades para reforzar el lenguaje

7. ¡Somos actores!

Procedimiento: Para trabajar el lenguaje, una de las actividades que se pueden realizar son pequeñas obras de teatro en las que cada alumno tenga un papel y digan pequeñas frases. Estas pequeñas historias tienen que ser de la vida diaria, para que les resulte más fácil de interpretar.

Algunos ejemplos pueden ser: una pequeña charla con su amiga sobre su novio, la ropa que han comprado, etc. Lo recomendable es que realicen esta actividad por parejas, ya que les cuesta menos hacerlo de esta forma. Sin embargo, si tus alumnos son capaces de hacer intervenciones en grupos también lo puedes hacer así.

Materiales: Para realizar esta actividad no van a ser necesarios materiales, tan solo el guion de la interpretación de cada niño.

Consejos: Tienes que estar atento y resolver las dudas que vayan surgiendo. Al principio, puede que no sean capaces de respetar el orden de turno y que incluso pisen la intervención del compañero, ya que en algunas ocasiones pueden llegar a ser muy impulsivos.

Por ello, con esta actividad serán capaces de aprender a comunicarse adecuadamente.

8. ¿Qué hicimos ayer?

Procedimiento: Otra actividad muy buena para trabajar el área del lenguaje es la que vamos a explicar a continuación. Es una actividad que les suele gustar mucho y que además fomenta el compañerismo dentro de clase.

Los alumnos, uno por uno, tienen que contar lo que hicieron después del colegio en el día anterior de forma detallada. De esta forma, tienen que pensar en lo que tienen que contar y estructurarlo de forma ordenada.

Material: Para realizar esta actividad no será necesario ningún material.

Consejos: Tienes que escuchar de forma detenida lo que cuentan los alumnos, por si en algún momento estos no saben cómo continuar o cómo expresar alguna actividad.

En ocasiones, es recomendable que se den unas sencillas pautas de cómo se debe contar a los compañeros las actividades que realizaron en el día anterior. 

Actividades para desarrollar la autonomía

9. Vamos al mercado

Procedimiento: En el aula podemos simular muchas situaciones cotidianas que permitirán al niño mejorar su autonomía y saber cómo actuar en cada momento. Uno de los ejercicios que podemos realizar con este fin es simular que van a comprar comida al mercado.

Para ello, tenemos que dividir a los niños por parejas donde uno de ellos hará de vendedor y el otro de comprador. A continuación, tienen que actuar basándose en lo que ellos harían desde que entran por la puerta del supermercado o de la tienda hasta que van a comprar.

De esta forma, podemos ver exactamente cómo lo harían y cómo se dirigirían al vendedor y viceversa.

Materiales: Para realizar esta actividad serán necesarios algunos juguetes, estos van a ser lo que nuestros alumnos van a comprar. En el caso de que simulemos la compra en una frutería, sería recomendable que los juguetes fueran frutas.

Consejos: Deberás mediar en todo momento la actividad, ya que al principio se dirigirán al frutero de cualquier forma y no respetarán las pautas de comunicación de forma real.

Por ello, previamente se les tendrá que explicar cómo deben de comunicarse de forma educada, así como las posibles frases que tienen que decir en cada momento.

Por ejemplo: “al llegar a un sitio se dice buenos días”, “si quieres comprar algo antes tienes que preguntar ¿podría ponerme un kilo de plátanos?”, etc.

10. ¿Cuánto vale?

El manejo del euro también es algo muy importante para desarrollar la autonomía de las personas con síndrome de Down, por ello, también tenemos que realizar ejercicios de este tipo.

Procedimiento: Una buena forma de que aprendan el valor de las monedas y billetes de euro, es presentarles problemas reales de la vida cotidiana: cuanto más diarios sean más fácil será para ellos interiorizar el manejo.

Un claro ejemplo podría ser escribir en la pizarra un problema matemático como el siguiente:

Luisa quiere comprar un pantalón y una camisa. El pantalón cuesta 10 euros y la camisa 6. Si tiene 20 euros, ¿puede comprárselos?, ¿cuánto le sobra?, ¿cuánto cuestan las dos cosas en total?

Para que les sea más fácil realizar esta actividad, se les facilitará dinero con aspecto real en forma de billetes y monedas. Esto suele ser muy útil, ya que les cuesta imaginarse el valor de las monedas.

Materiales: Monedas y billetes de euro que simulen al real, papel, lápiz y goma de borrar.

Consejos: Para poder realizar este ejercicio, deben tener nociones básicas del valor que tiene cada moneda. Por ello, puedes ir intercalando este ejercicio con explicaciones fáciles y breves, comenzando por las monedas de menor valor hasta terminar por las que tienen más, al igual que con los billetes.

Una vez que les has explicado los valores, puedes ayudar a que integren ese nuevo conocimiento realizando problemas como estos y adaptando sus cantidades.