Deporte y Ejercicio

Cultura física: concepto, historia, beneficios, importancia


La cultura física es el conjunto de disciplinas basadas en el entrenamiento tanto corporal como mental del ser humano, teniendo como objetivo el logro de un equilibrio entre el cuerpo y la mente.

Comúnmente, se la relaciona con la educación física o con la práctica de deportes, no obstante, estos son solo algunos campos de la cultura física. Existen otros campos relacionados con la salud y los buenos hábitos de alimentación y descanso, que también pueden ser incorporados como parte de sus prácticas.

Debido a sus múltiples beneficios, estas prácticas o disciplinas pueden ser utilizadas tanto en niños como en adultos. En el caso de los niños, se plantean las prácticas de la cultura física desde el colegio, puesto que allí pueden ser inculcados, a una edad temprana, los hábitos de hacer deporte y llevar una buena alimentación.

En el caso de los adultos, las prácticas de la cultura física suelen ser impulsadas como parte de las actividades de ocio y estilo de vida saludable.

Al llevar una vida saludable y hacer periódicamente actividad física, se mejoran muchas capacidades a nivel corporal y mental, reduciendo también las posibilidades de sufrir ataques cardiovasculares, entre otras enfermedades.

Índice del artículo

Concepto de cultura física

El concepto de cultura física está relacionado con el bienestar integral del ser humano, intentando lograr un equilibrio en lo que se conoce como “binomio cuerpo-mente”. Este bienestar y equilibrio puede ser logrado a partir de la práctica de deportes, el consumo balanceado y saludable de alimentos, y el descanso pasivo y activo del cuerpo y la mente.

Uno de los propósitos de la cultura física es apartar al hombre de las costumbres del sedentarismo, un mal que, debido a las características laborales de hoy en día, es muy común entre la gente.

Adicionalmente, la cultura física involucra la noción de alma, con el objetivo de trabajar en el mejoramiento de las condiciones afectivas y emocionales, en busca del mejoramiento constante de la calidad de vida de las personas.

Historia

Si bien hay estudios que demuestran que el ser humano siempre ha hecho actividad física, los primeros en introducir la idea de una cultura física fueron los griegos, al decir que a la educación física había que acompañarla con una educación intelectual y moral.

Esto volvió a cobrar importancia en el siglo XX, mayormente en Europa y América del Norte, gracias a la fuerte preocupación que existía por las condiciones laborales de los trabajadores, que se tornaban cada vez más monótonas y sedentarias, trayéndole problemas físicos y psicológicos a las personas.

Con base a ello comenzó a cobrar fuerza este nuevo concepto que le agregaba al deporte y a la educación física nuevas nociones para tener una perspectiva más sociocultural y orientada mayormente a la salud del ser humano que a la competencia deportiva.

Actualmente se puede decir que la cultura física es un estilo de vida y es tenida incluida como parte fundamental en programas gubernamentales, escolares y hasta en los trabajos. A la mera noción sobre la actividad física, le ha sido agregado el componente nutricional, que busca generar bienestar en el cuerpo y la mente, a partir de la ingesta de una dieta balanceada y saludable.

Beneficios

Los beneficios de la cultura física se pueden ver en los siguientes niveles:

Nivel orgánico

  • Se produce un incremento y mejora tanto en la movilidad como en la elasticidad de las articulaciones.
  • Se crea una mayor capacidad de reacción y coordinación.
  • Previene la obesidad mediante la aceleración del metabolismo, reduciendo la grasa corporal.
  • Se genera mayor resistencia a la fatiga.

Nivel cardiovascular

  • Hay una disminución de la presión arterial y el pulso es más regular.
  • Aumenta la resistencia orgánica, permitiendo al cuerpo realizar actividad física por más tiempo y bajo una mayor intensidad.
  • Mejora la circulación.
  • Se previenen enfermedades como la hipertensión arterial, cáncer de colon y diabetes, entre otras.
  • Se incrementa la eficiencia del funcionamiento del corazón disminuyendo el riesgo de arritmias cardíacas.
  • Se reduce la presión arterial.
  • Se reduce el riesgo de coagulación sanguínea.

Nivel pulmonar

  • Se mejora el funcionamiento de los músculos respiratorios, permitiendo una mejor oxigenación del cuerpo.
  • Incremento en la capacidad pulmonar.

Nivel metabólico

  • Colabora en la disminución y mantención de un peso corporal saludable.
  • Genera más capacidad para utilizar grasas localizadas como fuente de energía.
  • Reduce tanto la concentración de triglicéridos, LDL y colesterol, como la generación de ácido láctico.

Nivel neuroendocrino

  • Se producen más endorfinas lo que genera una mayor tolerancia a ambientes cálidos.
  • Se disminuye la producción de adrenalina
  • Incrementa la creación de sudor y la eliminación de toxinas.

 Nivel gastrointestinal

  • Mejora el funcionamiento intestinal.
  • Reduce el riesgo de padecer cáncer de colon.

 Nivel osteomuscular

  • Se mejora la estructura de las articulaciones, tendones y ligamentos.
  • Al ganar fuerza muscular, se aumenta la fuerza ósea, lo que posibilita la prevención de la osteoporosis.
  • Gracias al fortalecimiento de los músculos lumbares, se mejora la posición corporal.

Nivel del sistema nervioso

  • Se mejora la coordinación, los reflejos y el tono muscular.

Nivel psíquico

  • Se mejora la memoria y la autoestima.
  • Estimula la creatividad y la capacidad afectiva.
  • Se disminuye el estrés, la agresividad, la ansiedad y la depresión.
  • Genera un incremento en el autocontrol y la fuerza de voluntad.

Importancia

La importancia de la cultura física reside en el mejoramiento de la condición del ser humano, no solo en el aspecto físico, sino también en el aspecto emocional.

Es un elemento fundamental en los programas de promoción de la salud para niños y adolescentes que sufren de alguna patología, como la hiperactividad, dificultad de aprendizaje o deficiencia mental.

Al practicar alguna actividad física con regularidad, se reduce el estrés, generando una disminución en los estados emocionales como la depresión y la ansiedad. Y a su vez se mejoran las capacidades cognitivas e intelectuales.

Al hacer ejercicio físico se disminuyen las posibilidades de sufrir riesgos cardiovasculares gracias a los cambios hormonales, neurológicos y metabólicos que produce esta actividad.

Referencias 

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