Historia

Sociedad novohispana: concepto, origen, características, clases sociales


¿Qué es la sociedad novohispana?

La sociedad novohispana fue aquella que se conformó tras la conquista del Imperio mexica por parte de los españoles. En 1521, las tropas comandadas por Hernán Cortés tomaron el control de la capital azteca, Tenochtitlán, y en pocos años extendieron sus dominios hasta gobernar todo el territorio mesoamericano.

En 1535, la Corona de Castilla fundó el Virreinato de Nueva España, cuyo primer virrey fue Antonio de Mendoza y Pacheco. Los españoles tuvieron desde ese momento la intención de colonizar esas tierras y de crear una sociedad basada en un único lenguaje, el español, una religión, la católica y una cultura.

En los primeros momentos tras la conquista, la sociedad novohispana estaba formada por los colonizadores españoles y los indígenas. Con el tiempo, comenzaron a aparecer los mestizos, hijos de españoles e indígenas. La llegada de esclavos africanos fue un nuevo elemento que se incorporó a la creación de esa sociedad.

Más adelante, surgió otro grupo social formado por los hijos de españoles ya nacidos en América, los criollos. A pesar de gozar de privilegios por su origen, durante la etapa colonial tuvieron vetados los puestos de mayor responsabilidad. Por otra parte, la unión de mestizos, indígenas, negros y otras etnias acabó configurando a las llamadas castas.

Características de la sociedad novohispana

Forma de gobierno

Para controlar más el extenso territorio conquistado, la metrópolis creó el llamado Virreinato de Nueva España. Aunque el poder recaía en el monarca español, este era representado por un virrey que actuaba en su nombre.

Además del virrey, existían dos audiencias, una en Ciudad de México y otra en Guadalajara, que ejercían el poder judicial. Los pueblos de indios eran gobernados por los alcaides mayores, mientras que en los españoles la máxima autoridad eran los corregidores.

Desigualdad social y legal

Una de las características más marcadas de la sociedad novohispana era la desigualdad social y legal que existía en su seno.

Las diferencias entre los distintos habitantes estaban determinadas por su procedencia. Los españoles llegados desde la península tenían todos los derechos y privilegios.

Tras ellos se situaban los criollos, hijos de españoles nacidos en Nueva España. Estos fueron siendo cada vez más y, aunque formaban parte de la clase privilegiada, eran discriminados en algunos aspectos políticos.

Por su parte, los indígenas fueron objeto de varias leyes que debía dotarlos de ciertos derechos. Las llamadas Leyes de Indias los declaraban hombres libres, pero estaban obligados a convertirse al cristianismo y estaban sometidos a una condiciones laborales casi de esclavitud.

Además, excepto algunos miembros de la nobleza indígena, su acceso a cargos públicos y a la posesión de la tierra estaba vetado.

Economía

En relación con la organización social, el sistema económico novohispano reproducía la desigualdad general. Las minas, el comercio y las tierras estaban en manos de los españoles.

Frente a estos, los indígenas eran solo considerados como mano de obra. Peor incluso era la situación de los esclavos negros llevados desde África.

Religión y cultura

Una de las prioridades de los conquistadores fue evangelizar a los pueblos indígenas que encontraron en la zona. El poder de la Iglesia católica era enorme, sobre todo en campos como la educación, la sanidad y la cultura.

La labor de los misioneros se ha enmarcado dentro de la llamada conquista espiritual. El objetivo era eliminar la cultura y religión de los indígenas y sustituirlas por las llevadas desde España.

Diversidad étnica y mestizaje

Con el tiempo, la sociedad novohispana fue volviéndose cada vez más diversa, lo que se convertiría en una de sus más importantes características. En el territorio convivían personas con un origen muy distinto: españoles provenientes de Europa, criollos, indígenas, africanos y las distintas castas que se fueron formando.

El primer tipo de mestizaje fue el resultado de la unión de españoles e indígenas. Estos mestizos no fueron los únicos, ya que con el tiempo fueron aumentando las llamadas castas, que definían a cada mestizo según el origen étnico de sus progenitores.

Clases sociales

La sociedad novohispana estuvo dividida en varias clases sociales y castas, todas marcadas en el origen étnico de los individuos.

Los pertenecientes a cada clase social tenían distintos derechos en aspectos como la posibilidad de poseer empresas o el acceso a los cargos políticos y religiosos más relevantes. En general, todos estos estaban reservados a los españoles procedentes de la península.

Españoles peninsulares

Los españoles procedentes de la península ocupaban la cúspide de la sociedad novohispano. Eran ellos los que ocupaban todos los altos cargos en la Iglesia y en el gobierno virreinal, además de ser los dueños de la gran mayoría de las empresas y tierras de cultivo.

Criollos

Con el tiempo fue apareciendo una nueva clase social formada por los hijos de españoles nacidos ya en la colonia. Estos tuvieron acceso a la educación y a la posesión de empresas, lo que hizo que fueran acumulando capital e importancia.

Sin embargo, distintas leyes les impedían ocupar los cargos políticos y eclesiásticos más importantes. Esta discriminación fue una de las razones por la que encabezaron buena parte de los movimientos independentistas.

Indígenas

Su papel se limitaba prácticamente a servir como mano de obra en el campo o las minas. Su acceso a la educación se limitaba a ser evangelizados por los misioneros y estaban obligados a pagar tributos a la Corona.

Mestizos

En los primeros tiempos de la colonia, los mestizos hijos de españoles e indígenas no tenían una consideración propia. Como personas libres, podían recibir cierta educación e, incluso, ser pequeños propietarios.

En lo social, no eran aceptados por completo en los grupos étnicos a los que pertenecían sus padres. Algunos de ellos fueron educados como españoles, ya que la Corona pensaba que un hijo de español no podía ser educado por los indígenas.

En épocas posteriores, la imagen de los mestizos fue empeorando. Así, se les consideraba “gente vil” y se les negó la posibilidad de ocupar cargos políticos o religiosos.

Castas sociales

Con el paso del tiempo, los mestizos, blancos, indígenas y mulatos fueron uniéndose entre ellos. Aparecieron así las castas, nombre que denominaba a estas mezclas.

Como estrato social, estas castas fueron muy discriminadas. Se trataba de un grupo muy heterogéneo que no encajaba en ningún tipo racial.

En el siglo XVIII apareció una clasificación de estas castas basadas en el origen étnico de sus padres. Los llamados cuadros de castas mostraban todo tipo de mezclas, como la de indio con negra (zambos), los de mulata con blanco (morisco), indio con mestizo (coyote) o blanco con coyote (harnizo).

Esclavos

La mortandad producida entre los indígenas provocó que fuera necesaria más mano de obra para las minas y tierras de cultivo. La solución fue llevar desde África a miles de esclavos.

Estos grupos no tenían ningún tipo de derechos. Su papel se limitaba a trabajar forzosamente para los españoles. Sin embargo, contribuyeron a que la sociedad novohispana fuera más diversa, tanto racial como culturalmente.

Referencias

  1. Palacio Nacional. La sociedad novohispana. Obtenido de historia.palacionacional.info
  2. Traslosheros, Jorge E. Estratificación social en el reino de la Nueva España, siglo XVII. Recuperado de colmich.edu.mx
  3. Secretaría de Cultura. Esclavitud de africanos y afrodescendientes en la Nueva España. Obtenido de gob.mx
  4. Tricks to Inherit. The social stratification of New Spain. Obtenido de blogs.uoregon.edu
  5. Hoyt Palfrey, Dale. Religion and society in New Spain: Mexico’s Colonial era. Obtenido de mexconnect.com
  6. Kicza, John E. New Spain. Obtenido de encyclopedia.com