Botánica

Heliconias: qué son, características, hábitat, distribución, cultivo


¿Qué son las heliconias?

Las heliconias (Heliconia) son un género de plantas de la familia Heliconiaceae (orden Zingiberales), donde se agrupan alrededor de 250 especies. El 98% de las especies de helioconias se encuentran distribuidas en Centro y Suramérica, y en las islas del Caribe, siendo Colombia el país que presenta el mayor número.

Las heliconias son neotropicales, nativas de América, aunque hay seis especies registradas en el Pacífico Sur. Se desarrollan mejor en sitios abiertos intervenidos por el ser humano, orillas de ríos y quebradas, así como en los claros de bosques.

Algunas especies son cultivadas debido a los hermosos colores que presentan sus inflorescencias, y se usan con fines ornamentales.

Las heliconias son hierbas de tamaño mediano a grande, a menudo con un gran crecimiento de rizomas o tallos subterráneos que crecen horizontalmente, con raíces en su superficie.

Los patrones de producción de rizomas, ramas y brotes erectos en las heliconias, les confieren capacidades variables para su reproducción vegetativa (de reproducción asexual).

Características y morfología de las heliconias

Brotes y tallos

– Cada brote de las heliconias se compone de un tallo y hojas, y a menudo, aunque no siempre, termina en una inflorescencia.

– Su porte es erecto, de 0.45 m a 10 m de altura, y las hojas pueden variar en formas y tamaños.

– El traslape o superposición de los pecíolos de las hojas forma el tallo, razón por la cual  técnicamente se denomina pseudotallo o falso tallo.

– Cada hoja está formada por dos mitades, separadas por una vena principal que se prolonga desde el pecíolo.

– En algunas especies, el pseudotallo tiene un pelaje distintivo, blanco, ceroso, el cual también puede estar presente en las inflorescencias y en el dorso de las hojas.

– En el tallo las hojas están dispuestas de forma opuesta.

Hojas

– Se componen de pecíolo y lámina configuradas en un plano bidimensional, y miran alternativamente a uno y otro lado de un eje.

– Las helioconias presentan tres tipos básicos de formasde sus hojas:

  1. Musoide: las hojas suelen tener pecíolos largos, dispuestos en la vertical, creciendo con la forma típica de las bananas.
  2. Zingiberoide: sus hojas se disponen horizontalmente y los pecíolos se recortan. Estas recuerdan las plantas de jengibre.
  3. Canoide: especies que poseen pecíolos de longitud media, ajustados al tallo de forma oblicua recordando las especies del género Canna.

Inflorescencias

– La característica más visible de este tipo de plantas es su inflorescencia colorida. Estas inflorescencias casi siempre se presentan en la parte terminal de los brotes erectos, pero en algunas especies pueden surgir en un brote basal sin hojas.

– Las inflorescencias pueden tener una orientación erecta o pendular con respecto al brote frondoso del cual emergen.

– Está formada por el pedúnculo (la parte del tallo entre la hoja terminal y la bráctea basal), estructuras similares a hojas llamadas brácteas (o espatas), el raquis, que conecta las brácteas adyacentes, y una serie de flores dentro de cada bráctea.

– Las brácteas pueden estar en un mismo plano (dísticas) o disponerse en forma de espiral alrededor del raquis.

– Las inflorescencias son producidas por un solo brote y pueden durar desde unos pocos días a meses, muriendo luego junto con el brote del cual emergieron. Antes de marchitarse, las flores que reposan en cada bráctea habrán producido semillas.

– La producción de inflorescencias puede ocurrir durante todo el año, o estar restringida a un periodo del mismo. Generalmente, el máximo número de inflorescencias producidas coincide con el período de lluvias de la zona.

Flores

– Cada bráctea aloja una serie de flores que varían en número, dependiendo de la especie. Las flores son hermafroditas, pues poseen tanto partes femeninas como masculinas.

– El perianto está conformado por tres sépalos externos y tres pétalos internos, unidos a la base y entre sí de diversas formas. Cuando estas se abren, un sépalo se libera del resto del perianto y permite entonces la entrada de los polinizadores.

– Los sépalos y pétalos son habitualmente amarillos, pero pueden variar entre el amarillo pálido al blanco en su base y, desde el amarillo pálido al amarillo intenso en la parte distal. En algunos casos, las flores pueden ser verdes o rojo rosáceo.

– Las flores de colores intensos suelen ser polinizadas por colibríes, mientras que las flores con poca o ninguna coloración suelen ser polinizadas por murciélagos.

Frutos

– El fruto es una baya que puede contener entre una y tres semillas de 1.5 cm de diámetro, de color verde o amarillo cuando está inmadura, tornándose azul o púrpura al madurar.

– Sus colores les hacen muy atractivas para ciertas aves y mamíferos, los cuales son los medios para su dispersión.

Hábitat y distribución

Origen

Las heliconias son nativas de los trópicos americanos, desde el trópico de Cáncer en México, hasta el trópico de Capricornio en Suramérica, incluyendo las islas del mar Caribe.

Muchas especies habitan lugares húmedos y lluviosos, aunque algunas pueden habitar lugares donde se presenta una época de sequía alternada con una época lluviosa.

Las heliconias se desarrollan muy bien en las zonas húmedas y bajas del trópico, por debajo de los 500 msnm. Sin embargo, en zonas de altura media y en selvas nubladas, se encuentran especies de heliconias únicas, que solamente se hallan en ese lugar (endémicas).

En alturas mayores a los 1.800 msnm, se encuentran muy pocas especies de heliconias.

Generalmente, habitan lugares intervenidos previamente por actividad humana, al borde de las carreteras y caminos, de ríos y quebradas, y en parches abiertos en el bosque por la caída de árboles.

Distribución geográfica

La mayoría de las especies del género Heliconia se encuentran en Centro y Suramérica, y en las islas del Caribe. Como se mencionó, hay 6 especies registradas en el Pacífico sur.

Colombia

De las 250 especies descritas, aproximadamente 97 están distribuidas en Colombia y 48 se consideran endémicas. Por esto, Colombia se considera el centro más grande de diversidad del género Heliconia en el mundo.

En Colombia, las regiones con mayor número de especies son la vertiente occidental andina, el valle del río Atrato, las vertientes del río Magdalena y la región oriental andina.

Aproximadamente, la mitad de las especies de heliconias que crecen en Colombia son endémicas. Las regiones con mayor proporción de endemismo son la andina, con el 75% y la costa del océano Pacífico, con el 20%.

Europa y Asia

En los continentes europeo y asiático existe un extraño grupo de heliconias, separado por miles de kilómetros de la mayoría de las demás especies de los trópicos.

Este grupo de heliconias se distribuye desde Samoa en dirección oeste hasta la isla central de Indonesia (Sulawesi), y se caracteriza por poseer flores y brácteas de color verde.

Aun hoy en día se desconoce la manera en la que estas heliconias pudieron alcanzar el Pacífico sur hace millones de años.

Reproducción

Polinización

En los trópicos americanos los colibríes son los únicos polinizadores del género Heliconia, mientras que en las especies del Viejo Continente, los polinizadores son los murciélagos que se alimentan del néctar de sus flores (nectarívoros).

En la región tropical del continente americano (neotrópico), las aves son atraídas por los llamativos colores de las flores y las brácteas, que presentan rojo, naranja, rosado y amarillo.

La longitud y curvatura de los tubos florales en las heliconias, se ha desarrollado por un proceso de coevolución con los picos de los colibríes.

Aunque cada flor permanece abierta solo por un día, hay muchas flores en cada bráctea y varias brácteas por cada inflorescencia, de manera que una planta de heliconia puede estar florecida por mucho tiempo.

Este hecho es aprovechado por los colibríes, que visitan las flores con sus picos alargados buscando néctar y transfiriendo el polen de una flor a otra.

Autocompatibilidad e hibridación

La mayoría de las heliconias son autocompatibles, lo que significa que una flor puede producir semillas a partir de la autopolinización (sin necesidad de ser fecundada por polen de otra flor).

Sin embargo, en muchos casos sí requieren de un polinizador que transporte el polen para que se pueda formar la semilla.

La polinización también puede lograrse por medios artificiales, lo cual es práctica frecuente en donde se cultivan heliconias con fines comerciales. En estos lugares no suelen encontrarse sus polinizadores naturales.

La fecundación artificial se realiza a mano, o se permite la intervención de nuevos polinizadores (como insectos o mamíferos).

Por otro lado, la fertilización cruzada entre especies diferentes, generalmente no resulta exitosa, aunque se han encontrado algunos híbridos que se forman de manera espontánea.

Cultivo

El suelo en el que se van a plantar heliconias debe ser enmendado con materia orgánica (en proporción tierra-materia orgánica de 3:1).

Los requerimientos de las heliconias son muy parecidos a los de las musáceas, por lo que el nitrógeno y el potasio son muy importantes para su buen desarrollo.

La mayoría de las especies son altamente susceptibles a la deficiencia de potasio, no toleran los suelos básicos (alcalinos) ni suelos mal drenados.

La distancia de siembra entre las plantas depende de la especie, siendo las más pequeñas plantadas a una distancia de 1 metro entre sí y 1,5 metros entre surcos.

En especies medianas, estas distancias frecuentemente se duplican, llegando incluso a triplicarse para las especies más grandes (como H. platystachys).

Fertilización

Normalmente se aplican fertilizantes como nitrógeno, fósforo y potasio (en proporción 1:1:3). Las cantidades deben ser similares a las habitualmente usadas con las musáceas.

Las heliconias son plantas que tienen altos requerimientos. La mejor manera de fertilizarlas es con un fertilizante soluble equilibrado. Se deben compensar las deficiencias de hierro, magnesio y manganeso.

Enfermedades y plagas

Las heliconias pueden ser afectadas por mohos y bacterias, lo que puede causarles daños considerables. Se recomienda, en el caso del cultivo en invernadero, mantener una apropiada higiene de los espacios y una buena ventilación para evitar la acumulación de agua sobre las flores.

En algunos casos, para el control de estas enfermedades, se recomienda el uso de fungicidas y algún compuesto con cobre (cúprico) para su uso en las flores.

Las plagas más comunes en las flores de heliconias son trips, pulgones, araña roja, nematodos, entre otros.

Ejemplos de especies de heliconias

Heliconia acuminata

Heliconia angustifolia

Heliconia brasiliensis

Heliconia augusta

– Heliconia bourgaeana

– Heliconia brenneri

– Heliconia aurantiaca

– Heliconia mariae

– Heliconia rostrata

– Heliconia burleana

– Heliconia caribaea

– Heliconia obscura

– Heliconia episcopalis

– Heliconia latispatha

– Heliconia pssitacorum

– Heliconia velutina

– Heliconia wagneriana

– Heliconia stricta

– Heliconia hirsuta

– Heliconia lennartiana

Referencias

  1. Abalo, J. y Morales, L. (1982) Veinticinco Heliconias nuevas de Colombia. Phytología, vol. 51.
  2. Berry, F. y Kress, W. J. (1991). Heliconia: an identification guide. Smithsonian Institute Press.
  3. Seifert, R. P. (1982). Neotropical Heliconia insect communities. The Quarterly Review of Biology.