Definición de desertización
En primer lugar, tenemos que exponer que el término desertización que ahora vamos a analizar en mayor profundidad tiene su origen etimológico en el latín. En concreto, deriva del verbo “deserere”, que puede traducirse como “olvidar” o “abandonar”.
strong>Desertización es el proceso y las consecuencias de la acción de desertizar. Este verbo, según el diccionario de la Real Academia Española (RAE), es sinónimo de desertificar: convertir un territorio fértil en un terreno desértico.
Es importante tener en cuenta, de todos modos, que la desertización no es lo mismo que la desertificación. Se entiende como desertización a una evolución propia de la naturaleza, que transforma las características del ambiente de una región y hace que el territorio en cuestión se vuelva un desierto. La desertificación, en cambio, está vinculada al daño que se produce en la tierra fértil y que suele estar vinculado al comportamiento del hombre.
Entre los motivos que pueden causar la desertización, se encuentran diversas razones propias de la biología, la geología y hasta la astronomía. En cualquier caso, el fenómeno se produce sin la participación directa del ser humano.
Entre las muchas causas que dan pie a que tenga lugar el fenómeno de la desertización se encuentran las siguientes:
• Las lluvias torrenciales, que van arrastrando todo lo que sería la cubierta vegetal de un territorio.
• La sequía, que trae consigo no sólo un desequilibrio hídrico sino también un daño notable en lo que respecta a los sistemas de producción de la tierra que se tienen.
• La erosión, que destruye el suelo y otros elementos de la naturaleza tales como las rocas.
Puede decirse, por lo tanto, que la desertización y la desertificación son fenómenos que transforman terrenos productivos en desiertos. Su diferencia es que, en el primer caso, las causas son naturales, mientras que, en el segundo, el fenómeno se produce por la actividad de las personas.
Actualmente la desertización está considerada como uno de los fenómenos ambientales que más preocupa al mundo. De ahí que las distintas autoridades de la materia en todo el planeta continuamente estén analizándola y planteando propuestas para poder hacerle frente de manera efectiva.
En este sentido, uno de los organismos que más trabaja al respecto es la Convención de la ONU de Lucha contra la Desertización. La misma se creó a mediados de la década de los años 90 y se encuentra conformada por unos 180 países, aproximadamente.
Entre las naciones que más se ven afectadas por problemas como el que nos ocupa están las que dan forma a África. No obstante, también hay otros rincones de España o de América del Sur que sufren aquellos, que parecen no paralizarse en ningún momento.
La desertización puede advertirse en diversas partes del mundo, donde provoca problemas ecológicos pero también económicos y sociales ya que la gente pierde sus medios de subsistencia. El proceso se inicia con la degradación de la tierra y, si no se detiene a tiempo, puede derivar en una desertización irreparable sin que exista la posibilidad de recuperación para el terreno.