Definición de delfín
La etimología de delfín nos lleva al vocablo latino delphin, un término derivado del griego delphís. Un delfín es un animal mamífero acuático que forma parte del grupo de los cetáceos.
Los delfines son piscívoros: comen peces. Existen más de una treintena de especies de este animal que suele medir unos tres metros de largo y que tiene una única abertura nasal.
El cuerpo del delfín es oscuro en su parte superior y blanquecino en el sector inferior. Cuenta con una cabeza grande, boca grande con dientes en sus dos mandíbulas, hocico alargado y ojos pequeños.
Es importante mencionar que los integrantes de la familia Delphinidae viven en aguas saladas, por lo general tropicales o templadas. Los llamados delfines de río, en cambio, pertenecen al conjunto familiar Platanistoidea.
La inteligencia es una de las características más sobresalientes de los delfines. Es habitual que interactúen con las personas, siendo muchas veces entrenados para participar de distintos tipos de espectáculos. Incluso son empleados por ejércitos para la detección de minas y otras tareas.
No debemos olvidar que no es fácil comparar la inteligencia de dos especies, y menos si se trata de dos tan diferentes como los delfines y los humanos, ya que cada una tiene su propia forma de adquirir los conocimientos, de comunicarse y vivir en sociedad y también varían sus características físicas, entre las cuales podemos destacar su aparato fonador, su sistema respiratorio y sus extremidades.
La inteligencia del delfín debe centrarse en desplazarse con destreza por el agua, de una forma que nosotros no podríamos siquiera comenzar a intentar; por otro lado, la nuestra supone un desplazamiento por tierra, haciendo uso de nuestras piernas, algo que ellos no pueden hacer. Del mismo modo podríamos contrastar nuestras formas de comunicarnos, de conseguir el alimento e incluso de jugar; ninguna de las dos partes debería parecer menos inteligente que la otra, ya que sus roles en el planeta son muy diferentes, y la naturaleza no pretende que compitamos, sino que nos complementemos.
Para comunicarse con otros ejemplares de su especie, un delfín puede apelar a saltos, danzas y sonidos. Estos animales también usan la ecolocalización para orientarse: emiten sonidos y luego interpretan el eco que se produce.
Se sabe que el delfín es un animal social, que comparte su vida con varios individuos con los que conforma una familia. En las zonas en las que abundan los alimentos, cada familia puede tener más de mil integrantes. Esta especie puede crear lazos sociales muy estrechos, que se comparan con lo que nosotros denominamos amistad, y esto se ha deducido de diversas situaciones; por ejemplo, es común que un delfín ayude a un compañero herido a llegar a la superficie. El ser humano también ha comprobado que cada individuo posee un nombre propio, que los demás pueden pronunciar para llamarlo.
Se conoce con el nombre de hibridación al cruce de dos especies diferentes, que se produce mediante el apareamiento de dos individuos que pertenezcan al mismo género o, como mínimo, a la misma familia. Hablando específicamente de los miembros de la familia Delphinidae, existen los híbridos denominados balfines, los cuales no se encuentran en la naturaleza sino que han sido obtenidos de forma artificial en un parque acuático hawaiano, donde los crearon mezclando hembras de delfín mular y machos de falsa orca.
Delfín, por otra parte, era un título nobiliario que se le otorgaba al príncipe heredero del rey de Francia. Dicha distinción existió entre mediados del siglo XIV y las primeras décadas del siglo XIX. En la actualidad, por extensión, se conoce como delfín al sucesor que elige una personalidad para que siga sus pasos.