Definición de bungalow
Determinar el origen etimológico del término bungalow nos lleva a dejar patente que se trata de una palabra anglo-hindú. Y es que es fruto de “bangala”, una palabra de la lengua hindi que significa “casa al estilo de Bengala”, que fue utilizada por el inglés, adaptándola, hasta darle forma al vocablo que ahora nos ocupa.
Bengala hay que decir que se trata de una ciudad india que tiene la particularidad de que sus viviendas se construyen utilizando únicamente madera.
Un bungalow es una especie de cabaña o de casa de dimensiones reducidas que, por lo general, está orientada al turismo. Se trata de una construcción sencilla, de una única planta o piso, que cuenta con las comodidades básicas.
Por ejemplo: “Ya reservé un bungalow frente al mar para pasar las vacaciones de verano”, “Mi abuelo vive en las sierras y tiene un complejo de bungalows”, “Creo que resultará más barato que alquilemos un bungalow y no que vayamos a un hotel”.
Puede decirse que un bungalow es una vivienda algo rústica. Es frecuente que se construya en zonas turísticas naturales, como una playa, una sierra o un bosque. Por su diseño, el bungalow busca la practicidad, careciendo de espacios superfluos. Un bungalow turístico, más allá de la cantidad de camas que presente, suele contar con una cocina/comedor y un baño, además de muebles, televisor y otros aparatos o electrodomésticos.
En un sentido más amplio, un bungalow puede ser cualquier vivienda con las características mencionadas, incluso si es de uso permanente (es decir, una residencia fija). Los bungalows son habituales en la periferia de ciertas ciudades de los Estados Unidos, siendo elegidos por gente de avanzada edad para su retiro (sobre todo porque, al presentar todas las instalaciones en planta baja, son construcciones cómodas para quienes tienen problemas de desplazamiento).
Por otra parte, en algunas regiones, también se conoce como bungalow a una casa que tiene dos pisos o plantas. Definir con precisión qué es un bungalow, por lo tanto, nos obliga a prestar atención al contexto.
Retomando su pronunciación, en países de habla inglesa tienden a acentuarla en la primera sílaba, convirtiendo la «u» en uno de los sonidos similares a nuestra «a» y la «w», en una «u» (dado que en inglés dicha letra no se llama «doble v», sino «doble u»). En el resto del mundo hay diversas versiones, que generalmente varían por la acentuación (convierten el término en agudo), por la pronunciación de la «u» tal y como lo haríamos en castellano, por la omisión de la «w» o bien por pronunciarla como una «v».
A pesar de la sencillez que el bungalow representa en su forma original, en la actualidad puede tratarse de una vivienda que se ajusta perfectamente a todas las necesidades de sus usuarios, especialmente cuando se alquila a turistas en zonas de playa, ya que en estos casos se busca una experiencia de absoluta comodidad.
Teniendo en cuenta el importante auge que, a nivel turístico, ha experimentado el bungalow es habitual que muchas personas se topen con alojamientos como él y no sepan identificarlos en comparación con otros tipos. Así, por ejemplo, la principal diferencia que existe entre una cabaña de madera y un bungalow es que la primera tiene un interior totalmente diáfano, no posee distribuciones de ningún tipo. Sin embargo, en la otra construcción sí existen estancias separadas.
A propósito de su uso como vivienda en temporada vacacional, el bungalow suele encontrarse en zonas rodeadas de naturaleza, aunque bien comunicado con los centros urbanos y próximo a todos los servicios básicos, como ser supermercados y restaurantes. Cuando se combina su entorno verde con su aspecto rústico se genera un aspecto que incita al descanso, a la desconexión de las obligaciones y el ritmo de la ciudad.
Si bien el bungalow es un tipo de casa muy sencillo, esto no significa que no pueda ser espacioso; de hecho, está pensado para alojar a un mínimo de dos personas y suele ser escogido por familias con niños y grupos de amigos. Con respecto a los precios, es necesario resaltar que en la mayoría de los casos resulta considerablemente más económico que un hotel, aunque todo depende de las necesidades de cada persona; en un bungalow, por ejemplo, se espera que los usuarios cocinen y lleven a cabo las tareas de limpieza, algo que no tienta a quienes buscan la paz absoluta.
Precisamente el precio es la principal razón de que muchas personas a la hora de viajar y disfrutar de unas vacaciones se decanten por alojarse en un bungalow. No obstante, también lo hacen por estas otras razones:
• Les otorga mayor independencia, libertad y menos control que el que hay en un hotel.
• No tienen que estar sujetos a los horarios de desayunos, comidas o cenas de los establecimientos hoteleros.
• Se pueden sentir más como si estuvieran en casa.
• No obliga a tener que “soportar” a otros clientes molestos o a los ruidos que se generan en un hotel debido a la limpieza, por ejemplo.