Definición de bonsái
El término bonsái, procedente de la lengua japonesa. En concreto, es fruto de la suma de dos términos de dicha lengua como son estos:
-El sustantivo “bon”, que se utiliza para definir a un cuenco o un plato de gran tamaño.
-El verbo “sai”, que puede traducirse como “plantar”.
De ahí que el significado tal cual de bonsái sea plantar en un cuenco.
Se utiliza para nombrar a una planta a la cual, a través de diversos procedimientos, se le trunca su crecimiento. Los bonsáis, de este modo, siempre conservan un tamaño pequeño.
La poda, el corte de las raíces, el pinzado y el trasplante son algunas de las acciones que se llevan a cabo para modelar un bonsái. El objetivo de la técnica es que la planta o el árbol, más allá de su pequeñez, mantenga la apariencia del ejemplar natural.
Se cree que este tipo de cultivos surgieron hace cerca de 2.000 años en China. Fueron los monjes taoístas quienes comenzaron a incursionar con los bonsáis, considerando a los árboles como símbolos de lo eterno. La tradición señalaba que la persona capaz de mantener un árbol en una maceta lograba ganarse la eternidad.
Hace unos 800 años, la técnica desembarcó en el territorio japonés, donde poco a poco se fue popularizando. De este modo los bonsáis dejaron de ser propiedad de religiosos y nobles y se expandieron a toda la comunidad como elementos decorativos.
Es importante tener en cuenta que un bonsái es una planta “normal” que se conserva pequeña a partir de distintas técnicas (como la poda y el corte), pero cuya genética no se modifica. Por eso, con los cuidados adecuados, un bonsái vive idéntica cantidad de tiempo que un árbol corriente de esa misma especie.
Los bonsáis pueden calificarse de acuerdo a su estilo (tronco recto, tronco inclinado, raíces expuestas, etc.) o su tamaño (grandes, medianos, pequeños o miniaturas).
Entre los consejos y cuidados más importantes que hay que tener en cuenta para tener un bonsái se encuentran los siguientes:
-Tiene que colocarse en un lugar donde reciba sol y aire e incluso donde pueda existir cierta humedad. De ahí que se pueda establecer tanto en una terraza como en un balcón e incluso en una ventana. Eso sí en invierno hay que protegerlos del frío.
-Cuando se riegue hay que echarle agua hasta que toda la tierra esté húmeda.
-Como es bien sabido por todos, los bonsáis requieren ser podados. Esto es algo que se realizará en primavera y también a finales de verano.
-La época más recomendada para proceder a abonar los bonsáis es el otoño.
-De la misma manera, para poder conseguir que estos árboles tengan la forma deseada hay que contar con las herramientas adecuadas. Nos estamos refiriendo, sobre todo, a lo que son las tijeras que poseen un corte cóncavo.
Numerosos son los famosos que se han declarado fans incondicionales de los bonsáis y que disfrutan cuidándolos y podándolos como es debido. Este sería el caso del ex presidente de España Felipe González.